HANÓI, 30 Dic. (Reuters/EP) -
El Gobierno vietnamita ha desalentado a los internautas de leer los comentarios que circulan por la Red y que "menosprecian" al Partido Comunista, advirtiendo de que se trata de una "intoxicación" a pocas semanas de la celebración de un congreso de reestructuración de la formación gobernante en el que se elegirá un nuevo líder.
"Estas páginas web están difamando al Gobierno y a los líderes y las políticas de nuestro partido", ha señalado el viceministro de Información y Comunicaciones, Truong Minh Tuan, en Facebook.
Aunque, según el viceministro, se prevé que aumenten las críticas contra la formación hasta enero, mes en que concluye el congreso de la formación, el Gobierno ha prometido no interrumpir el acceso a Internet para combatir los comentarios que "en su mayoría proceden del exterior". No obstante, Vietnam es un país en el que las críticas políticas continúan estando restringidas.
Varias organizaciones para la defensa de los Derechos Humanos han denunciado los arrestos, intimidaciones y encarcelamientos de decenas de blogueros y activistas. Mientras tanto, Internet continúa aumentando su popularidad entre la población, donde casi la mitad de los ciudadanos vietnamitas (unos 45 millones) usan la red --de los cuales dos tercios no superan la treintena--.
El control de Internet, y especialmente de las redes sociales, se ha convertido en un tema controvertido para el Partido Comunista de Vietnam, que tras 40 años en el poder, teme que restricciones como las introducidas en China pongan a la población en su contra. Solo un tercio de los vietnamitas tienen cuenta en Facebook.
En este sentido, el primer ministro del país, Nguyen Tan Dung, instó a los usuarios de la red social a usar Facebook con responsabilidad. De hecho, Dung fue el primer alto cargo del partido en proponer que el Gobierno se abriera una cuenta en la plataforma.
El Partido Comunista se juega mucho en el Congreso, pues gobiernos extranjeros e inversores observarán muy de cerca las políticas vietnamitas, así como el ritmo y alcance de las reformas económicas que se derivarán de la elección del nuevo dirigente.
En la asamblea, convocada cada cinco años, el Comité Central del Partido Comunista elegirá a un nuevo líder y designará un Politburó, aunque todavía se desconoce la identidad de los potenciales candidatos.