HANÓI, 3 Ago. (DPA/EP) -
Las autoridades vietnamitas sopesan confinar la ciudad de Da Nang, ubicada en el centro del país, tras los brotes de coronavirus detectados en cuatro fábricas donde trabajan miles de personas.
Los brotes comenzaron a finales de julio en el marco de la reapertura turística --unas 800.000 personas visitaron Da Nang en julio, según el Gobierno-- y desde entonces han dejado más de 200 nuevos positivos y seis muertos, las primeras víctimas mortales desde el inicio de la pandemia en la nación asiática, que tiene un total de 621 personas contagiadas.
La mayoría de los nuevos casos de COVID-19 están vinculados al principal hospital de Da Nang, que ya ha sido cerrado. La mayoría de los pacientes ingresados eran ancianos con enfermedades crónicas.
Sin embargo, ahora preocupan los brotes en estas cuatro fábricas, que emplean a 3.700 personas pero están situadas en un polígono industrial donde trabajan cerca de 80.000, por lo que las autoridades vietnamitas temen que acaben descontrolados.
El Gobierno ha reaccionado realizando test masivos entre los habitantes de Da Nang, Hanói y Ho Chi Minh con los que ha puesto a más de 100.000 personas en cuarentena. Además, se ha suspendido todo el tráfico de entrada y salida en Da Nang, excepto para los transportistas, y Hanói y Ho Chi Minh han cerrado bares y restaurantes y prohibido actos masivos.
No obstante, durante una reunión de Gobierno celebrada el domingo, el alcalde de Ho Chi Minh, Nguyen Thien Nhan, se refirió a Da Nang como "peligroso epicentro de la COVID-19" y propuso confinarlo.
El primer ministro, Nguyen Xuan Phuc, ha indicado que las primeras semanas del mes de agosto serán cruciales para frenar el avance del coronavirus en Vietnam, instando a las autoridades a actuar rápido.