MADRID, 24 May. (EUROPA PRESS) -
Estados Unidos ha emitido un aviso este lunes sobre los "crecientes riesgos" para aquellas compañías estadounidenses y personas jurídicas que tienen lazos con empresas estatales y negocios controlados por el Ejército de Sudán.
El Departamento de Estado ha advertido, además, en un comunicado de que la participación de empresas estatales controladas por militares sudaneses podría dañar la reputación de los negocios en Sudán, así como su reputación entre los accionistas, los empleados y la sociedad civil sudanesas.
"Las empresas y las personas que operan en Sudán y la región deben realizar una mayor diligencia en relación con las cuestiones de Derechos Humanos y ser conscientes de los riesgos potenciales para la reputación de realizar actividades comerciales y/o transacciones con empresas estatales y empresas controladas por militares", ha indicado en un comunicado.
Dicho aviso también ha sido compartido por el Departamento del Tesoro, el de Comercio y el de Trabajo con el objetivo de "resaltar los riesgos crecientes para las empresas y las personas estadounidenses asociadas con la realización de negocios con empresas estatales sudanesas".
De esta forma, Estados Unidos ha explicado que, tras el golpe de Estado de octubre de 2021, el Ejército de Sudán "ha controlado" y tiene "el control efectivo" de "todas" las empresas estatales y ha incrementado "su control directo" sobre ellas.
Si bien es cierto que estas preocupaciones son anteriores a la asonada de 2021, Washington ha advertido que la toma de posesión y las acciones militares "desde entonces" han "exacerbado" estas acciones y podrían "afectar negativamente a las empresas y personas estadounidenses y sus operaciones en Sudán".
Según Estados Unidos, "cualquier asistencia financiera o técnica brindada por empresas estadounidenses al Ejército o a esta red de empresas que controlan" corre el riesgo de "asociación potencial con abusos a los Derechos Humanos y con actores que impiden la transformación democrática del país".
Así, ha señalado que al menos 650 de las empresas que cotizan en bolsa en Sudán son estatales, de las cuales al menos 200 son propiedad directa del Ejército. "Las empresas de propiedad estatal se benefician del trato preferencial del Gobierno y de una transparencia y supervisión poco estrictas en comparación con las empresas privadas", ha advertido.
Asimismo, ha indicado que el Gobierno de transición sudanés "había comenzado a abordar el problema de las empresas de propiedad estatal en la economía de Sudán antes de la toma militar", incluyendo la futura privatización de este tipo de empresas, por lo que "publicó una lista parcial" con el objetivo de solucionarlo.
"Sin embargo, a pesar de algunas mejoras bajo el Gobierno de transición liderado por civiles, la organización no gubernamental Transparencia Internacional sigue clasificando a Sudán como uno de los países más corruptos del mundo", ha señalado.
Estados Unidos también ha explicado que otra de las razones para emitir el aviso es que el país es el tercer mayor productor de oro de África y que las empresas estatales, controladas por militares, manejan gran parte del comercio de oro en el país y su exportación al exterior.
"El comercio de oro está mal regulado en Sudán y está relacionado con el trabajo infantil y el uso de mercurio para el refinamiento, entre otras preocupaciones", ha subrayado, agregando que, por ello, "invertir, formar asociaciones o facilitar la expansión de estas empresas puede implicar riesgos para la reputación de los negocios y las personas estadounidenses".
En concreto, el oro está en la lista del Departamento de Trabajo estadounidense como un bien producido "con trabajo infantil" o "trabajo forzado". Así, ha advertido a las empresas estadounidenses de que revisen sus cadenas de suministro y tomen medidas para protegerse contra la complicidad de las violaciones laborales.
"El Panel de Expertos de Naciones Unidas para Sudán encontró que muchas de las minas de oro en Darfur están bajo el control de las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), una parte de las fuerzas de seguridad sudanesas", ha indicado.
Otra de las preocupaciones se centra en los Derechos Humanos, especialmente en las zonas mineras situadas cerca del Nilo Azul y los estados del norte del país. "Instamos a las empresas que participan en el comercio de oro en Sudán o cuyos proveedores obtienen oro de Sudán a que adopten prácticas de diligencia", ha expresado.
"Este aviso se relaciona específicamente con las empresas estatales y las empresas controladas por militares. Estados Unidos no busca restringir o desalentar la inversión responsable o las actividades comerciales en Sudán con contrapartes sudanesas de propiedad civil", ha aclarado.