MADRID, 5 Dic. (EUROPA PRESS) -
El ministro israelí de Defensa, Moshe Yaalon, ha criticado este viernes durante el Saban Forum, celebrado en Washington D.C., la falta de implicación de Estados Unidos en el conflicto de Oriente Próximo y ha asegurado que a Israel no le gusta ver a otros países buscando el apoyo de Rusia.
"Estados Unidos no puede quedarse de brazos cruzados con respecto a Oriente Próximo y al autodenominado Estado Islámico", ha afirmado. "Debe liderar e involucrarse más", ha añadido, antes de replicar que Israel "no está contenta de ver a Jordania, Arabia Saudí y otros países suníes corriendo hacia Rusia", según declaraciones recogidas por el diario israelí 'Haaretz'.
En cuanto a la guerra civil de Siria, que dura ya casi cinco años, Yaalon ha afirmado que suníes y kurdos pueden poner "botas en el terreno de combate", pero que tienen que ser "orquestados y liderados" por alguien. Además, el ministro ha añadido que los "soldados occidentales en Oriente Próximo deben ser el último recurso". "Tenéis que dar más poder a las fuerzas locales para luchar", ha replicado.
El ministro de Defensa ha indicado que "Siria sufrirá de inestabilidad crónica durante mucho tiempo", antes de añadir que Israel no prevé un "final a esta tragedia".
YAALON CONTRA IRÁN
Asimismo, ha criticado la decisión de tener a Irán sobre la mesa de negociación sobre el conflicto sirio en Viena, afirmando que esta situación da a Irán la oportunidad de "ganar más hegemonía".
Yaalon ha aprovechado la situación para recuperar el discurso sobre el acuerdo sellado entre Teherán y las potencias mundiales en cuanto a su programa nuclear y reiterar que Tel Aviv sigue "considerando el acuerdo nuclear como un error histórico".
También en su discurso el ministro ha hecho alusión a la situación de conflicto entre israelíes y palestinos, que se ha elevado de nivel las últimas semanas, con ataques más continuos, principalmente en los territorios ocupados. En este contexto, Yaalon ha indicado su oposición a la solución de un solo estado, asegurando que Israel no quiere gobernar a los palestinos.
"Estamos contentos de que ya tengan su independencia política", ha afirmado el ministro, quien sostiene que Tel Aviv quiere reforzar la competencia palestina para gobernarse a sí misma.