MADRID 25 Ago. (EUROPA PRESS) -
La milicia kurda Unidades de Protección Popular (YPG) han recalcado este miércoles que no se retirará de las zonas que controla al oeste del río Éufrates, después de la ofensiva militar lanzada por Turquía en el norte de Siria con el respaldo de la coalición que encabeza Estados Unidos.
"La intervención turca en Jarablus es una intervención hostil. Su objetivo principal, más que Estado Islámico, son los kurdos", ha dicho el portavoz de la milicia, Redur Xelil, según ha informado la cadena de televisión kurda Rudaw.
"Nuestras fuerzas son parte de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) e insistimos en nuestra misión y objetivo. No escucharemos las demandas de Turquía o de potencias exteriores", ha recalcado.
En este sentido, Xelil ha manifestado que "Turquía no puede imponer su agenda ni sus intereses". "Nuestras fuerzas están allí y no se retirarán. Nadie tiene derecho a pedir a las YPG que abandonen la zon", ha remachado.
'Escudo del Éufrates' es la mayor incursión de Turquía en Siria. El único precedente de despliegue de tropas turcas fue la misión de 2015 para salvaguardar la tumba de la figura otomana Suleiman Shah.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha explicado este miércoles que el objetivo es expulsar a Estado Islámico y a las YPG --brazo armado del principal partido kurdo de Siria-- de la frontera.
"Sea Estado Islámico o las YPG, son organizaciones terroristas", ha dicho Erdogan en una rueda de prensa desde Ankara. "Que una organización terrorista combata a otra organización terrorista no la hace inocente", ha subrayado, en alusión a las YPG.
Turquía vincula a los kurdos con los rebeldes del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), a los que considera una organización terrorista --igual que la UE y Estados Unidos-- y combate desde hace décadas en el sureste del país.
Sin embargo, los kurdos han sido durante los últimos años la principal arma de Occidente, sobre todo de Estados Unidos, contra los terroristas del Estado Islámico, que han logrado instaurar un 'califato' en la franja norte de Siria e Irak.
El gran avance que las FDS han realizado en las últimas semanas en el norte de Siria ha activado las alarmas de Turquía, que teme que el peso militar de los kurdos sirios les dé la autonomía territorial que reclaman desde hace años para el norte del país.
El primer ministro turco, Binali Yildirim, ha subrayado este miércoles que no permitirá que los kurdos logren una entidad propia en Siria. "No habrá un corredor kurdo. No habrá una entidad separada en la frontera turca. Habrá una Siria unida", ha sostenido.
El Gobierno turco ha advertido de que la operación militar continuará hasta "neutralizar" las amenazas contra la seguridad nacional. "Haremos lo que sea necesario", ha enfatizado el ministro de Exteriores, Mevlut Cavusoglu.