LAS PALMAS DE GRAN CANARIA 29 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Coloquio de Presidentes 'Canarias no es un solar', que se desarrolló en el Cabildo de Gran Canaria y que contó con la presencia del presidente, Antonio Morales, y de los ex presidentes autonómicos Román Rodríguez y Paulino Rivero, ha concluido en destacar a la liberalización de los usos del suelo rural y la renuncia a un proyecto común para las islas como algunos de los "peligros" de la Ley del Suelo que impulsar el Ejecutivo regional,
En este sentido, acompañados por el urbanista Carmelo Padrón, la mesa también subrayó la falta de consenso y de debate que ha caracterizado la elaboración de esta norma que se encuentra en su trámite parlamentario.
El presidente del Gobierno de Gran Canaria, Antonio Morales, subrayó que el Cabildo fue la primera institución canaria en oponerse a esta nueva normativa, que además vacía de competencias a los cabildos.
Aquí, recordó que la isla se quedó sola entre las instituciones insulares en esta defensa, al igual que en la de un reparto justo para el IGTE, porque "en ambos casos se trata de comprar voluntades".
"ATENTA CONTRA EL MODELO DE DESARROLLO QUE DEFIENDE GRAN CANARIA"
"La nueva norma territorial --añadió-- atenta directamente contra el modelo de desarrollo que defendemos para Gran Canaria, donde trabajamos por un modelo de ecoisla, un modelo sostenible basado en la movilidad, energías renovables, tratamiento de los residuos, soberanía alimentaria y reforestación, entre otras".
Sin embargo, Morales comentó que se ha roto "el consenso, estamos ante una enorme irresponsabilidad histórica", al tiempo que avanzó que usará los mecanismos a su alcance, incluidos los jurídicos, para que esta norma "no condicione el futuro de esta tierra".
"Es inadmisible que el Gobierno se escude en la lentitud de las tramitaciones al tiempo que un voraz neoliberalismo vacía lo público, y como ejemplo citó que el Cabildo destina apenas un 12% de su presupuesto al Capítulo I de personal, una cifra muy inferior a sus necesidades", dijo.
De esta manera, se preguntó que "¿cómo no se van a retrasar los procedimientos?", al tiempo que reconoció el esfuerzo de los trabajadores por sacar adelante las tramitaciones.
Un diagnóstico inadecuado, abrir la puerta al uso del territorio para generar economía en época de crisis, equiparar simplificar la norma con eliminar los controles, implantar un escenario competencial municipalista y eliminar el control previo -y por ende abrir la puerta a la litigiosidad-, fueron el resto de los aspectos negativos que destacó junto a la pérdida de capacidad de los cabildos y a la liberalización del uso del suelo rústico.
RODRÍGUEZ: "ES FALSO QUE LA NORMA PROTEJA A LOS AGRICULTORES"
Román Rodríguez, por su parte, aseveró que la defensa de los agricultores es un "pretexto" y que es "falso" que esta norma los proteja, de hecho, de prosperar, el sector primario será el primer perjudicado cuando los usos que permite le ganen terreno a su actividad.
"¿Qué tiene que ver --cuestionó--, facilitar muros o regadíos con permitir usos industriales y turísticos bajo la excusa de eliminar trabas tediosas".
Igualmente, criticó la renuncia a un proyecto común, "el Gobierno canario se desentiende del territorio, pero si hay uno que necesite una estructura por encima de lo local e insular, es Canarias", aseveró en coincidencia también con Paulino Rivero.
RIVERO: "ESTA LEY PUEDE SER MAGNÍFICA O FRANCAMENTE MEJORABLE"
"Esta ley puede ser magnífica o francamente mejorable dependiendo del ámbito de aplicación", apuntó Paulino Rivero. "Magnífica para Extremadura, Castilla-La Mancha o cualquier enclave continental, pero no para un archipiélago con sus particulares características", aclaró.
Asimismo, expuso que tras 28 años como alcalde, al igual que Antonio Morales, y siendo declaradamente municipalista, coincidió en manifestarse contrario a la centralización de las competencias en los municipios dado que la presión de los vecinos condicionan la acción local y, en cualquier caso, para un crecimiento armónico no puede haber 88 ambiciones distintas.
Por otra parte, entendió que centrar la dinamización de la construcción en la rehabilitación y la renovación es incompatible con la flexibilización del territorio.