El Ayuntamiento de Santa Cruz organiza una exposición itinerante sobre su patrimonio histórico

SANTA CRUZ DE TENERIFE 12 Dic. (EUROPA PRESS) -

El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife ha organizado una exposición itinerante para mostrar a los estudiantes del municipio los atractivos de su patrimonio histórico y cultural y que sintetiza la diversidad de bienes arqueológicos, etnográficos, arquitectónicos y tradicionales inmateriales que atesora.

La muestra es una iniciativa de la Concejalía de Patrimonio Histórico y forma parte de los proyectos de carácter divulgativo que ha emprendido esta área municipal para generalizar el conocimiento de este tipo de bienes entre los jóvenes y para concienciar sobre la necesidad de su conservación y mantenimiento.

El alcalde de la ciudad, José Manuel Bermúdez, y la concejal de Patrimonio Histórico, Yolanda Moliné, asistieron este mediodía a la apertura de la muestra, cuya primera parada es el IES El Chapatal, donde estará toda la semana. La próxima llegará al instituto Benito Pérez Armas.

Bermúdez aseguró a los alumnos que "lo que no se conoce no se puede llegar a querer", por lo que animó a todos los estudiantes a profundizar en el conocimiento de los bienes patrimoniales de Santa Cruz, "que se encuentran en sus calles y en sus monumentos".

El alcalde explicó que el objetivo de la muestra es despertar la inquietud de los estudiantes del municipio por la historia de la ciudad y completarles la información que en hoy en día pueden obtener a través de los recursos digitales. Destacó, asimismo, que Santa Cruz es el municipio que más bienes de Interés Cultural tiene en toda Canarias.

Moliné, por su parte, destacó la importancia de difundir las riquezas patrimoniales del municipio, especialmente entre la población joven, puesto que son las nuevas generaciones las que van a disfrutar de las mismas, así como las responsables de cooperar en su conservación y mantenimiento.

Ideada por Cultania, una joven empresa canaria especializada en la gestión cultural y el patrimonio histórico, la exposición recorrerá durante el presente curso académico todos los institutos de Educación Secundaria del municipio.

El itinerario por los distintos centros educativos estará complementado con una charla introductoria de unos 30 minutos, impartida por un especialista de la propia empresa.

La exposición, compuesta por 12 paneles de grandes dimensiones, hace un repaso por los elementos más singulares del patrimonio de Santa Cruz, estén o no declarados como Bien de Interés Cultural.

Así, a través de textos y material gráfico diverso, se propone un recorrido que incluye la mención de bienes arqueológicos tan importantes como el Barranco del Muerto, el del Pilar o La Gallega; de edificaciones de interés etnográfico e histórico vinculadas a actividades agrícolas tradicionales como la Hacienda de Las Palmas de Anaga o los molinos de Llano del Moro, Barranco Grande y Cuevas Blancas. También habrá sitio para expresiones populares y tradiciones como el Carnaval, la Semana Santa, las Cruces de mayo o La Gesta.

Igualmente, la muestra atiende a la enorme diversidad que posee el patrimonio arquitectónico del municipio, que reúne ejemplos singulares en sus monumentos o en los grandes conjuntos históricos como el Antiguo Santa Cruz, El Toscal o el denominado Barrio de Los Hoteles. Finalmente, se destaca la prolífica presencia del patrimonio en la vía pública con sus plazas, alameda, fuentes o esculturas, entre las que sobresalen, para este último caso, las vinculadas a las exposiciones internacionales de Escultura en la Calle celebradas en 1973 y 1994.

Santa Cruz de Tenerife es el municipio de Canarias que más bienes de Interés Cultural alberga. Los más de cuarenta BIC que se distribuyen, tanto por el casco urbano como por los distintos barrios y distritos, es el reflejo de un largo proceso vital que evidencia, a través de su patrimonio histórico y cultural, la prosperidad de una ciudad que ha sabido desarrollar su crecimiento y expansión demográfica, conservando intacta parte de su esencia primigenia.

Sin embargo, gran parte de esa riqueza patrimonial es desconocida por los propios chicharreros. Pese a su relevancia, son muchos los enclaves arqueológicos, los elementos etnográficos o las edificaciones arquitectónicas que pasan desapercibidos para vecinos y turistas.