SANTA CRUZ DE TENERIFE 25 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife va a modificar cuatro ordenanzas fiscales que entrarán en vigor el próximo 1 de enero y supondrán una merma de ingresos para el consistorio de unos 4,8 millones de euros, a razón de 25 por vecino.
Los detalles de la rebaja fiscal han sido expuestos este miércoles en rueda de prensa por el alcalde, José Manuel Bermúdez, y el concejal de Hacienda, Manuel Martínez, quienes han señalado que el Ayuntamiento "se puede permitir" esta rebaja porque está "saneado" y cumple todos los criterios de endeudamiento y estabilidad presupuestaria.
Así, con respecto al IBI --que por ahora no se prevé modificar en sus aspectos generales--, la bonificación aumenta de un 40 a un 50 por ciento en viviendas que tengan sistemas de placas solares para generar energía.
En cuanto a la plusvalía, la bonificación pasa de un 50 a un 75 por ciento en las transmisiones de terrenos o derechos de dominio, una medida que pretende beneficiar las herencias, ya que el impuesto "castiga" el ahorro y afecta a las clases medias, ha comentado Martínez.
Sobre el impuesto de rodaje, el Ayuntamiento hará un reajuste con una reducción del 50 por ciento en los coeficientes que se aplican al cálculo final, mientras que la tasa de recogida de basuras también cae un 20 por ciento.
Bermúdez ha comentado que esta rebaja fiscal "es una manera de colaborar" con el desarrollo económico de la ciudad, ya que va a aumentar el consumo de las familias y las propias empresas, que tendrán más disponibilidad para acometer obras de mejora y aumentar la plantilla.
Martínez, por su parte, ha destacado que la rebaja fiscal se realiza sin afectar al gasto social del Ayuntamiento --de hecho el próximo año crecerá un 30%--, y ha incidido en que el modelo fiscal que defiende el consistorio va vinculado a conseguir determinados "estímulos", como el fomento de las energías renovables o la atracción de empresas de transporte.