LAS PALMAS DE GRAN CANARIA 17 Feb. (EUROPA PRESS) -
La ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha acompañado este jueves al presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, y a su homólogo en el Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, en el acto que se ha celebrado con motivo del comienzo de las obras para hacer realidad la central hidroeléctrica de bombeo (CHB) reversible de Salto de Chira.
El inicio de estas obras, que todos los presentes e intervinientes han calificado como un "gran día", implicará que se haga efectivo el primer "gran proyecto de almacenamiento energético masivo" en Canarias para la operación del sistema eléctrico, lo que según Red Eléctrica Española (REE) permitirá aportar una "mayor seguridad" de suministro e incrementará la integración de energías renovables.
El acto, desarrollado en la sede de la Institución Ferial de Canarias (Infecar) de Las Palmas de Gran Canaria, ha contado también con la presencia de la presidenta de Red Eléctrica de España (REE), Beatriz Corredor, así como con los alcaldes de Gran Canaria, parlamentarios nacionales y autonómicos, además de una amplia representación empresarial y social de la isla y el archipiélago.
En el mismo, Ribera ha destacado que el proyecto Salto de Chira es un "gran ejemplo del camino" que se debe recorrer para "seguir impulsando un modelo de energías limpias, baratas y eficientes", ya que ha manifestado que el almacenamiento "va a ser una de las piezas clave" de la transición energética tanto por "su contribución a la electrificación como por su capacidad para dotar a las energías renovables de gestionabilidad", algo que dijo es "especialmente importante" en sistemas no interconectados como son las islas.
Agregó que es en ese punto donde el Salto de Chira representa un "gran avance, mejorando la garantía de suministro, la seguridad del sistema eléctrico y la penetración renovable". Así, ha apuntado que con proyectos como este y la apuesta decidida por las renovables, la descarbonización y la reducción de la dependencia energética, se conseguirán "unas islas 100 por 100 sostenibles en los próximos años".
En este marco, Ribera ha subrayado la apuesta que el Gobierno central está haciendo en la gestión del agua y de la energía con Canarias, avanzando que en la planificación que REE presentará en los próximos días se prevé una inversión de más de 800 millones de euros para acometer la transición ecológica en el archipiélago.
70 MESES DE OBRAS
Así tras "11 años de trabajo, estudios", según ha apuntado el presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, se produce el arranque de unas obras que prevén durar 70 meses, resaltando que se trata de un proyecto que "goza de todas las garantías".
La central hidroeléctrica del Salto de Chira supondrá una inversión superior a los 400 millones de euros y generarán más de 4.300 empleos, de los que más de 3.500 se producirán en la isla de Gran Canaria.
Por su parte, el presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, ha resaltado que este es un proyecto "modélico" en cuanto al uso de las energías y que contribuirá al objetivo marcado por el Ejecutivo regional de que en 2030 el "60 por ciento del mix energético" sea renovable.
Para Torres el Salto de Chira es una instalación "esencial" para lograr la soberanía energética de Canarias y "aminorar" los efectos del cambio climático.
MÁS DEL 90% SOTERRADO
La presidenta de REE, Beatriz Corredor, ha destacado durante su intervención que este proyecto tiene detrás más de "100.000 horas" de ingeniería para que sea el "más vanguardista" del mundo y ha querido poner en valor que se ha sacado hasta en tres ocasiones a información pública, lo que lo "ha mejorado muchísimo".
Corredor ha subrayado que se trata de un proyecto cuyos estudios medioambientales han sido "exhaustivos", afirmando que "todo lo que se ha podido soterrar, se ha soterrado" para evitar el impacto visual de las infraestructuras, apuntando que el 91 por ciento se sitúan bajo tierra.
La central de Salto de Chira, declarada de interés general por el Gobierno de Canarias, aprovecha la existencia de dos grandes embalses (las presas de Chira y de Soria) situados en el interior de Gran Canaria para construir entre ambos la central hidroeléctrica de bombeo de 200 MW (equivalente aproximadamente al 36% de la punta de demanda de Gran Canaria) y 3,5 GWh de almacenamiento.
También incluye una estación desalinizadora de agua de mar y las obras marinas asociadas, así como las instalaciones necesarias para su conexión a la red de transporte. El agua será un elemento "esencial" para el funcionamiento de la nueva infraestructura, si bien es también un recurso escaso en el archipiélago.
Por ello, el Salto de Chira "garantizará el caudal necesario" en los embalses para el funcionamiento de la central a través de la planta desaladora de agua que se instalará en Arguineguín para cumplir con su objetivo de almacenar energía.
Asimismo han resaltado que esta infraestructura reforzará la garantía de suministro de Gran Canaria al aumentar la potencia instalada en el sistema, lo que se considera un "elemento fundamental" para un sistema eléctrico como el canario, aislado, de tal forma que en un caso de interrupción del suministro, la central permitirá "agilizar y reducir drásticamente" los tiempos de reposición.
También, indican, permitirá incrementar la integración de energías renovables en el sistema al aprovechar los excedentes provenientes de este tipo de fuentes gracias a su capacidad de almacenamiento.
Así se prevé que en el año 2026 la central incremente la producción renovable un 37 por ciento, elevando la cobertura media anual de la demanda con este tipo de generación al 51 por ciento, pudiendo en momentos puntuales "ser mucho mayor". Además permitirá una reducción de emisiones de CO2 de un 20 por ciento.
Por otra parte, se prevé que la central genere unos ahorros al sistema eléctrico de 122 millones de euros al año al fomentar la independencia energética de la isla y reducir la importación de combustibles fósiles.
Finalmente, se ha apuntado que en los últimos años Canarias ha multiplicado por tres la potencia eólica instalada que, sumada a la fotovoltaica, hacen un total de 615 MW, lo que ha permitido que la cobertura de la demanda con renovables haya pasado de un 7,8 por ciento en 2017 a un 19,9 por ciento en 2021.
Por último, las alcaldesas de Mogán, Onalia Bueno, y la de San Bartolomé, Concepción Narváez, han considerado ambas que este proyecto "mejorará la calidad de vida de los vecinos" de sus municipios, además de que en el caso de Narváez también entiende que supondrá un atractivo turístico.