LAS PALMAS DE GRAN CANARIA 29 Ene. (EUROPA PRESS) -
El servicio de Anestesia, Reanimación y Unidad del Dolor del Hospital Universitario de Gran Canaria Dr. Negrín, ubicado en Las Palmas de Gran Canaria, está realizando de forma piloto una terapia que facilita el movimiento de los pacientes ingresados en las unidades de cuidados intensivos (UCI) a través de un aparato de cinesiterapia (terapia a través del movimiento).
Al respecto, explican que esta técnica, que supone un complemento a la fisioterapia del paciente crítico dentro de las unidades de cuidados intensivos, se realiza a través de un dispositivo que permite a las personas ingresadas y que se encuentran encamados realizar movimientos incluso cuando están sedados. De esta forma, se consigue un beneficio importante para la movilidad del paciente y, por lo tanto, para su estado de salud general, según informó el Gobierno regional en nota de prensa.
El aparato que se utiliza es el denominado Moto-med Letto-2 que permite fundamentalmente reducir el tiempo en cama del paciente, acelerar la retirada de la ventilación mecánica, evitar o disminuir la debilidad adquirida en cuidados intensivos y mantener su capacidad cognitiva.
Al respecto, señalan que el movimiento precoz estimula también el riego sanguíneo, la circulación y el metabolismo, al tiempo que evita la reducción de la musculatura (atrofía), así como la rigidez de las articulaciones (profilaxis de contracturas).
La técnica, indican, supone un apoyo al tratamiento de fisioterapia que realizan a diario estos pacientes, de tal forma que aunque tengan poca fuerza pueden también llevar a cabo un entrenamiento "eficaz" en activo, ya que el aparato permite adaptar la ayuda que presta según los objetivos de movilidad. Sin embargo, el tratamiento también puede ser pasivo, asistido o resistido según las necesidades de los pacientes.
Esta iniciativa se enmarca en los protocolos de movilización precoz que se desarrollan en la unidad de Reanimación. Al respecto, señalan que los estudios científicos demuestran las ventajas de esta técnica como una medida integrada en el tratamiento de fisioterapia habitual, o incluso como una medida de terapia de movimiento a nivel domiciliario.
El aparato asistido por motor permite un movimiento cíclico de las piernas y los brazos/torso, pudiendo ser realizado desde la cama de un hospital. Además, contribuye a optimizar la gestión del tiempo, reducir el esfuerzo en la terapia y mejorar su efectividad.
Por último, señalan que desde el servicio de Anestesia, Reanimación y Unidad del Dolor del centro hospitalario lo que se pretende con ello es contribuir a mejorar el estado de salud y la recuperación funcional del paciente. Añaden que en el año 2020 ingresaron en la Unidad de Reanimación 817 pacientes, con una estancia media de 3,56 días y un índice de ocupación del 79,45 por ciento.