SANTA CRUZ DE TENERIFE 15 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Cabildo de Tenerife ha presentado este miércoles el Operativo Brifor de Prevención y Extinción de Incendios Forestales previsto para el próximo verano, que durará desde el 13 de junio hasta el 16 de octubre, pudiendo ser prolongado, y estará compuesto por 287 efectivos y 69 vehículos (diez aéreos y 59 terrestres).
En la presentación, el consejero de Medio Ambiente, José Antonio Valbuena, ha explicado que las principales novedades del Operativo son la reorganización de los dispositivos, lo que permitirá ser más eficientes dando una mayor cobertura, y la tarea preventiva que se ha realizado desde el Cabildo para evitar que se produzcan incendios.
José Antonio Valbuena hizo hincapié en que la mayoría de los incendios son provocados, de ahí que la Corporación insular haya querido lanzar un mensaje de concienciación a la ciudadanía para que cuando quieran disfrutar del monte extremen las precauciones, dado que el verano es la estación de mayor riesgo de incendios forestales.
El responsable del Operativo, Florencio López, indicó que este año, como novedad, se han incorporado dos nuevas brigadas tipo 1 (con capacidad para ser helitransportadas), que se unen a las siete ya existentes y a las que se les ha dotado de una mayor capacidad para adaptarse a la demanda de recursos según la tipología del incendio que se produzca.
Así, estas unidades estarán compuestas por ocho especialistas que podrán hacer cualquier servicio de extinción, lo que permitirá una intervención más rápida en algunos casos y con mayor capacidad de enfrentarse a una situación más grande en otros, dando una mayor versatilidad al Operativo para adaptarse a cualquier situación.
Los 287 efectivos del Operativo dispondrán como medios materiales de un helicóptero de transporte y extinción con base en La Guancha, tres autobombas nodriza con capacidad para 9.000 litros, 10 autobombas forestales con capacidad de 3.000 a 6.000 litros, 6 autobombas medianas con capacidad de 1.500 a 3.500 litros y 17 autobombas ligeras pick-up de 500 litros.
Asimismo, se dispone de un vehículo de Puesto de Mando Avanzado y 22 vehículos todoterrenos de transporte. Además, para esta campaña se ha adquirido una nueva estación de carga de retardantes y dos kit de extinción adaptable a vehículos pick-up.
Además del Operativo Brifor, existen medios de extinción especializados cuya actuación puede desarrollarse en la isla, como los cinco helicópteros multifunción del Gobierno de Canarias, el helicóptero Kamov del Ministerio de Medio Ambiente con base en Los Rodeos y la Brif de Puntagorda, el avión de carga en tierra (Air Tractor) en el aeropuerto de La Gomera, los medios de autoprotección del Parque Nacional del Teide, el Consorcio de Bomberos de Tenerife y la Unidad Militar de Emergencias (UME).
MEDIDAS EXCEPCIONALES.
Con vistas a una mayor seguridad en las zonas forestales, tanto para evitar situaciones de riesgo como para la seguridad de los usuarios, durante estos periodos de tiempo sur intenso, en los que se dan las condiciones de gran incendio, se tomarán medidas excepcionales, como la prohibición de fuegos artificiales, uso del fuego en agricultura y trabajos forestales, cierre de áreas recreativas y recomendación o cierre de los accesos al monte. Estas medidas serían excepcionales y sólo ante situaciones de alto peligro de incendio.
Con el objeto de mejorar las capacidades del Operativo se ha realizado formación previa al inicio de la campaña sobre intervención en dos ámbitos especialmente significativos en Tenerife: técnicas de extinción en grandes incendios y actuación en incendio de interfase.
En el primer caso es un refuerzo en el empleo de técnicas de extinción para grandes incendios, donde los ataques directos al fuego con unidades pequeñas no son efectivos debiéndose configurar el operativo en grandes unidades de extinción para desarrollar otras técnicas específicas como quemas de ensanche, contrafuegos, cortafuegos químico o combinación de ataque directo y remate en líneas de fuego.
El segundo caso se refiere a los incendios que afectan a zonas de interfase, que son aquellas en las que se encuentran juntas las masas forestales, fincas agrícolas, viviendas y granjas. En estas zonas, además del daño ecológico que causan los incendios, se suma el riesgo para los habitantes, las pérdidas de producciones, viviendas y animales y los daños en infraestructuras, complicándose la extinción por el factor humano de la población, las infraestructuras peligrosas que pueden verse afectadas y las dificultades de despliegue y movimiento de equipos.