SANTA CRUZ DE TENERIFE 5 Nov. (EUROPA PRESS) -
El director general de Save the Children, Andrés Conde, ha reclamado este martes "corresponsabilidad" y "voluntad de acogida" a Gobierno y comunidades autónomas para mejorar la atención a los menores migrantes no acompañados y aliviar la "congestión" que sufre Canarias, con unos 6.000 menores bajo tutela.
En declaraciones a los periodistas tras reunirse con el presidente de Canarias, Fernando Clavijo, ha apuntado que aunque en su organización están "sobrecogidos y volcados" con las consecuencias de la DANA en Valencia no olvida la "catástrofe humanitaria continua" que vive Canarias por la ruta migratoria, con 55 personas fallecidas y desaparecidas el pasado fin de semana.
Ha tildado de "magnífica" la predisposición del Gobierno canario a colaborar en la gestión migratoria con una "mirada política práctica" y de respeto a los "derechos humanos", subrayando que "es imprescindible" dar "soluciones estructurales" a este fenómeno "venga el Gobierno que venga".
Conde ha instado a generar un "paradigma nuevo de protección de la infancia" y en ese sentido ha avanzado que en breve comenzará en las islas, junto a otras organizaciones, un proyecto de atención individualizada pues muchas veces se ven "desbordadas" con problemas vinculados al bienestar social o la salud mental.
Por ello ha indicado que se va a poner en marcha un proyecto con entrevistas específicas en su idioma para "identificar vulnerabilidades" y afinar en el proyecto migratorio de los menores a la hora de establecer futuros traslados.
Ha reconocido que la situación política en España "es complicada" para lograr un "consenso" pero entiende que es "imprescindible" porque el fenómeno migratorio va a seguir en el tiempo y va a afectar a todas las administraciones y a todos los partidos políticos.
"Canarias hace todo lo posible pero necesitamos un compromiso más amplio, es un problema de todos, no de los canarios", ha señalado.
Ha indicado también que los trámites administrativos para conceder el asilo, por ejemplo, "se dilatan porque no hay voluntad de acogida", de ahí que haya que "seguir empujando" porque esas personas "tienen derechos" y además es un "número perfectamente asumible".