UNICEF subraya la necesidad de que Canarias tenga un equipo de expertos intersectorial en todas las zonas sanitarias para atender a los menores
LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 17 Abr. (EUROPA PRESS) -
La directora de Influencia, Programas y Alianzas de UNICEF España, Lara Contreras, ha señalado este miércoles que la primera impresión de un menor no acompañado cuando llega a las costas españolas "puede cambiar muchísimo" su futuro, de ahí que subrayó la necesidad de dar formación a todos los profesionales que en algún momento, desde que llega el niño o niña a bordo de una embarcación, mantiene un contacto.
"La primera impresión del niño puede cambiar muchísimo el futuro de su vida, como sean recibidos", señaló Contreras en declaraciones a Europa Press con motivo de las segundas Jornadas de Salud Mental e Infancia en Movimiento que en esta ocasión se están celebrando en Casa África, en Las Palmas de Gran Canaria.
El repunte migratorio ha llevado a Canarias a recibir en los últimos meses a miles de personas migrantes que llegan a sus costas por vía marítima y entre ellos menores, solos o acompañados, que a falta de una modificación legislativa en la ley de extranjería, son competencia de la comunidad autónoma que los recibe, habiendo actualmente en las islas más de 5.500 niños y niñas no acompañados en unos 76 centros del sistema de protección canario.
En este sentido, la directora de Influencia, Programas y Alianzas de UNICEF España explica que las jornadas, en las que participan unos 80 profesionales de centros de protección de infancia, de atención primaria y de salud mental de todo el territorio español, busca ofrecerles conocimientos y pautas útiles para prestar un servicio de salud mental de calidad y de manera integral a la infancia migrante y adolescente.
Atendiendo, matizó, a que estos menores proceden de diversos orígenes étnicos y culturales, con privación de necesidades básicas o viven en un conflicto o en situaciones de violencia, y pasan por un trayecto que "es un infierno muchas veces, tanto si lo hacen solos como acompañado pero todavía solo son más vulnerables", donde apuntó les pueden "estar abusando sexualmente, deteniendo, ejerciendo, sufriendo violencia, soledad e incluso pérdida de esos seres que les acompañan".
Para, añadió, al llegar a las costas españolas tenerse que enfrentar a una situación "de incertidumbre" ante el desconocimiento de dónde se encuentran y a lo que se suma que normalmente no hablan el idioma del país, con lo que se encuentran "incomunicados". A ello, agregó, le sigue el tener que estar "en centros multitudinarios, que nadie les pregunte cuál es su interés", por lo que todo ello se convierte en otro trauma.
"En vez de ser recibidos de una manera comprensiva y empática, son recibidos y tienen que esperar a que les hagan unas pruebas de ADN, que un fiscal les determine la edad...", apuntilló para subrayar que lo que persiguen estas jornadas es que cuando los menores "lleguen y pisen nuestras playas, quien sea que se relacione con ellos, tiene las herramientas suficientes para tratarles desde esta parte emocional y psicológica".
"NO TIENE PROBLEMAS PSICOLÓGICOS"
La directora de Influencia, Programas y Alianzas de UNICEF España, Lara Contreras, explicó que el primer mensaje que se les traslada a las personas que tienen los contactos iniciales con los menores no acompañados es que "estos niños no tienen problemas psicológicos, tienen un trauma que bien tratado y bien gestionado puede ayudarles a ser niños perfectamente normales que aporten muchísimo" a la sociedad.
En este sentido, resaltó que los que vienen solos "tienen miedo principalmente" pero "no" problemas psicológicos, "no tienen bipolaridad, no se está hablando de niños que sean psicópatas, no", sino que pueden tener "una depresión, que pueden tener ansiedad, que tienen miedo", a lo que se añade la "incomunicación" y el que proceden de otras culturas, así como lo traumas que puedan tener.
"Encontramos que los niños tienen miedo, ansiedad, depresión, están con expectativas pero que no saben muy bien, con mucha incertidumbre, y sobre todo muchos están sin esa figura protectora que te genera un vínculo, que al final hace que te desarrolles mejor, es que no tienen ningún vínculo", apostilló.
Por ello, se incide en cómo deben hablarles, en que hay que estar con ellos en ese primer momento, "no es sólo un pediatra, que a lo mejor no les entiende, necesitan un triaje sanitario", es decir, que haya un mediador sociocultural que realice "ese acompañamiento más emocional", un traductor, "porque si no van a encerrarse en sí mismos", y un médico que "sepa cómo hablarles, que sea consciente del sufrimiento al que ha estado expuesto".
En definitiva, para transmitir a todos los equipos quién debe estar atendiendo al niño, qué tipo de profesionales y qué preguntas deben hacerle y también para intentar influenciar en las políticas públicas con el fin de que se generen grupos intersectoriales que trabajen juntos con un enfoque de salud mental.
EQUIPO DE EXPERTOS INTERSECTORIAL EN TODAS LAS ZONAS SANITARIAS
En el caso concreto de Canarias, Lara Contreras, que ha puesto en valor todo lo que está haciendo la comunidad con los menores no acompañados, expuso la necesidad de que vayan incorporando un equipo de expertos intersectorial en todas las zonas sanitarias para atender a los niños.
Así apuntó que Canarias "está haciendo todo lo que puede", pero "no lo puede hacer sola", ya que consideró que "necesita más recursos profesionales" en el archipiélago que reciban a los niños y tengan ese acompañamiento "adecuado en todos" los sentidos, además de que subrayó que debe de "haber una corresponsabilidad" del Estado y otras comunidades autónomas.
"Estos 5.500 niños no pueden ser atendidos solo por las instituciones canarias y los profesionales canarios. Es importante que esos niños sean trasladados a otras comunidades autónomas a centros adecuados, que tengan los recursos suficientes para toda esta atención integral. Pero es verdad que la recepción sigue siendo aquí y que aquí también se necesitan esos recursos", resaltó.
Finalmente, indicó que entre los ponentes de las jornadas han participado psiquiatras, expertos en problemas relacionados con la salud mental como adicciones o violencia sexual, expertos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, y de diversas direcciones generales del Gobierno de Canarias, así como especialistas de UNICEF España y UNICEF Comité Canarias.