LOGROÑO, 31 Jul. (EUROPA PRESS) -
El campo experimental de lavanda que, en La Rioja, se está desarrollando en Quel ha demostrado su "gran resistencia", tal y como ha indicado el agricultor encargado de su gestión, Chema Ayensa. Con él, se busca diversificar los cultivos riojanos
La consejera de Agricultura, Noemí Manzanos, y la directora general del ramo, María Jesús Miñana, han visitado este lunes el campo experimental de lavanda, acompañadas por el emprendedor Chema Ayensa que, con su socio Enrique Extremiana, lo puso en marcha en el año 2020.
Está ubicado en el paraje de 'Ordoyo', perteneciente al término municipal de Quel. Se trata de una parcela que, inicialmente, contaba con una extensión de seis hectáreas, pero que ha sido ampliada finalmente a veinte.
Con ella se pretende mostrar a los agricultores cómo llevar a la práctica en su explotación las técnicas y prácticas desarrolladas, así como sus ventajas e inconvenientes para lograr que sus producciones resulten más competitivas.
En mayo de 2020 fue cuando se realizaron las primeras operaciones de plantación, pero es, en este tercer año, el considerado como año de entrada en producción para estos cultivos, cuando se puede constatar la entrada en producción de este campo demostrativo.
Aromática y vistosa, la flor de la lavanda o espliego es apreciada por sus propiedades curativas, desde cicatrizar heridas hasta el alivio del insomnio y las migrañas.
"Esta iniciativa forma parte de los campos demostrativos que, desde el año 2007, el Gobierno riojano viene implementando. En ellos se han ido produciendo cultivos de diferentes especies que pueden resultar interesantes para que podamos diversificar nuestra economía y que forme parte del desarrollo rural de nuestra comunidad", ha explicado Manzanos.
La plantación, desde su origen en 2020 y hasta 2024, cuenta con una subvención de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Mundo Rural y Medio Ambiente por un importe de 47.635 euros. Con ella, "se apoya una alternativa real a cultivos extensivos de la zona, generando una diversificación de cultivos", ha declarado Miñana.
El ensayo ha evolucionado favorablemente, recuperando el retraso del que partían debido a la tardía fecha de plantación del primer año. La sequía continuada de este verano ha constatado la "gran resistencia" de este cultivo a climas extremos, mostrando que no hay diferencias significativas entre los ensayos de regadío y los de secano.
"La lavanda no necesita tierras de mucha calidad, se adapta a todo tipo de terreno" ha destacado Ayensa.
SEGUNDA FASE: ACEITES ESENCIALES
La directora general de Agricultura ha explicado cómo, "tras la primera fase de campos demostrativos y de experimentación con la implantación del cultivo y la llegada a plena producción de éste, se iniciará la segunda fase para convertir la flor en aceites esenciales, que servirán para su tradicional uso en farmacia o cosmética".
Asimismo, a tenor de la buena acogida de este tipo de campos, se han ampliado las opciones de ayuda, con partidas como el Plan Estratégico de la PAC (PEPAC) 2023-2027.
Dicho plan cuenta con una intervención regional en La Rioja para apoyar este tipo de iniciativas, con una ficha presupuestaria de 1,25 millones de euros para los próximos cinco años, que se concederán previa convocatoria a través del procedimiento de concurrencia competitiva.