Doctor en Historia indica que "el antitaurinismo es una seña de nuestra identidad"

Curso de Verano Derecho Animal, Ética y Sociedad
Curso de Verano Derecho Animal, Ética y Sociedad - UNIVERSIDAD DE LA RIOJA
Publicado: lunes, 24 junio 2019 14:04

   LOGROÑO, 24 Jun. (EUROPA PRESS) -

   El doctor en Historia Contemporánea, y subdirector del Observatorio de Justicia y Defensa Animal, Juan Ignacio Codina, ha considerado hoy que "el antitaurinismo es una seña de nuestra identidad tan importante, o incluso más, que la tauromaquia".

   Codina, autor de 'Pan y toros', ha ofrecido este lunes 24 de junio de 2019 la conferencia 'El pensamiento antitaurino español: una perspectiva histórica y jurídica' que abre el II Curso de Verano 'Derecho Animal, Ética y Sociedad' de la Universidad de La Rioja.

   En declaraciones a los medios de comunicación, ha señalado que el antitaurinismo español no es una moda pasajera, se remonta muchos siglos atrás en la historia. Así, ha situado en el siglo trece "los primeros atisbos del antitaurinismo español, cuando el Rey Alfonso Décimo el Sábio tilda a los toreros de infames".

   "A partir de ese momento, generación tras generación, en todos los ámbitos del pensamiento y en la política, el arte y la literatura se producen manifestaciones contra la tauromaquia al considerarla una barbarie que se sustenta en el sufrimiento de un ser vivo y en que un hombre expone su vida, todo ello por un mero afán de distracción", ha dicho.

   Ha citado a "Jovellanos, Larra, Unamuno, Emilia Pardo Bazán o Carolina Coronado", quienes se han manifestado en contra de "un espectáculo de barbarie que no aporta nada al progreso de la nación y que embrutece a la población al estar fundamentado en que se convierte el sufrimiento de un animal en un elemento de diversión".

   Ha añadido que uno de los argumentos que, históricamente, se han utilizado contra la tauromaquia es la "mala imagen" que proyecta. "Cómo se nos identificaba como un país de bárbaros porque nos divertíamos viendo a los hombres ponerse en peligro y tratando de manera bestial a los toros, haciendo de todo ello una fiesta".

   Así, ha relatado, su estudio pretende contrarrestar la imagen de una España "de castañuela, sol, playa, sangría y tauromaquia". "Cada país tiene sus propios clichés, el nuestro es ese y lo que trato de demostrar que históricamente ha habido destacadisimos personajes que han condenado la tauromaquia", ha explicado.

   Por otro lado, ha creído que la tauromaquia "ha sido un elemento que se ha utilizado políticamente para subyugar al pueblo español". Así, ha dicho, históricamente se ha utilizado como un "factor de adormecimiento social; una herramienta de distracción masiva".

   "Es la cuestión del pan y el circo, utilizando estos espectáculos bárbaros para que la gente esté distraída se cercena el pensamiento crítico, y esto es el sueño de todo gobernante", ha afirmado, señalando cómo Ortega y Gasset la denominaba "droga estupefaciente" y ante la que "la Generación del 98 denunció que había impedido el progreso".

   Preguntado por el hecho de que una formación política haya abanderado la tauromaquia, la caza y la bandera como un despertar de la españolidad ha señalado que "no deja de ser el mismo fenómeno: enseñar la banderita para que la gente se fije en la banderita y se despreocupe de otras cuestiones como las pensiones o la educación y la sanidad públicas".

   Cuestionado por el futuro de la tauromaquia ha creído que "el progreso de la sociedad tiende a la perfección moral y eso ha hecho que se dejen atrás situaciones bárbaras". "Tardaremos tiempo pero el final será la abolición o algo muy residual", ha considerado.

REFORMA CONSTITUCIONAL

   En la jornada de hoy también ha intervenido la abogada Nuria Menéndez, directora del Observatorio de Justicia y Derecho Animal, Nuria Menéndez, que ha "puesto sobre la mesa la necesidad de que se reforme la Constitución española"

   Así, ha explicado preguntada por la Ley de Protección Animal de La Rioja, la Constitución española, a diferencia de otras como la Austríaca o la Alemana, "no reconoce la protección de los animales expresamente, sólo tiene un mandato indirecto a través de la protección del medioambiente".

   Esto, ha dicho, puede "traer consecuencias en los casos en los que hay una contraposición de intereses", cuando se "restringen derechos por proteger a los animales".

   "Es el caso de las corridas de toros, que se consideran bien de interés cultural y hay un mandato para proteger la cultura, pero no los animales", ha explicado.

   Ha señalado cómo los códigos civiles "siguen considerando a los animales cosas", algo que "ha empezado a cambiar" para considerarlos "seres vivos con capacidad de sentir".

   En España había una reforma que ha decaído por el adelanto de las elecciones, aunque "sólo faltaba el paso al Senado, por lo que se tiene el texto".

   En este país hay, además, una "normalización de la violencia hacia los animales a través de los festejos animales en los que se ésta se normaliza, y tienen arraigo y apoyo de dinero público". Este es el "freno" para las "reformas legales en las que está el resto de los países".