El escritor invita a la reflexión con su libro '¿Fuiste feliz durante la pandemia?', sobre las altas expectativas que nos imponen para conseguirlo
LOGROÑO, 6 Dic. (EUROPA PRESS) -
"Hay veces que no nos preguntamos si somos felices porque tenemos miedo a la respuesta". Con esta reflexión el escritor y politólogo, Josu Ahedo, quiere concienciar a la ciudadanía de las "altas expectativas" que cada uno nos podemos poner a la hora de responder a esa cuestión. Todo para bajar a la tierra y recordarnos que "las pequeñas cosas, nuestro día a día, nuestro café del bar..." son suficientes para darnos cuenta de que, quizás, somos más felices de lo que pensamos.
Dosis de realidad que el también doctor en Filosofía ha querido dejar por escrito en el libro '¿Fuiste feliz durante la pandemia?. Lo que todavía podemos cambiar después del Covid-19' (Eunsa, 2024) para ayudar a los ciudadanos a valorar "lo que tenemos" y que, una vez, "pudimos perder".
Han pasado cinco años desde los primeros días de esta crisis sanitaria que paralizó el mundo y, aunque ya nos parezca algo lejano, "no debemos dejar de recordar todo aquello que nos enseñó", ha reflexionado.
Para conseguirlo presenta este libro que surgió "de una manera muy sencilla", reconoce a Europa Press. "Como todos en aquellos momentos, yo estaba confinado por la pandemia y como me gusta escribir y pensar creí que tenía que hacer algo para ayudar a la gente a superar esta crisis".
"Me puse a escribir, me daba paz, me ayudaba mucho a gestionar también mi salud emocional y una vez que todo fue pasando vi que tenía 25.000 palabras escritas, me gustó, pensé en darle forma de libro, mejorarlo, añadir reflexiones y publicarlo. Para mí fue como una terapia y espero que para la gente, también".
¿ES LA FELICIDAD UN TEMA 'TABÚ'?
"Pero... ¿cómo podemos hablar de la felicidad si parece que es un tema 'tabú'? -se pregunta el escritor-. La realidad es que nadie te pregunta si eres feliz, te preguntan qué tal te va todo, cómo estás, qué tal te encuentras... pero no nos atrevemos a hacer la primera pregunta porque si te dicen que no, tampoco sabemos cómo ayudar".
Además, la felicidad es algo que tampoco está en los 'curriculums' escolares "se habla de educación en valores, de compañerismo, de solidaridad, de respeto, de tolerancia.. pero no nos damos cuenta de que si realmente estamos en este mundo es para vivir felices y ésta debería ser una materia que se diera en las escuelas. Se debería hablar más de ello y, sobre todo, con más naturalidad".
Todo porque, si hay algo que tiene claro Ahedo Ruiz es que "hay que ser feliz y difundirlo. No hay que ser egoísta. Nuestra felicidad puede ayudar a los demás y debemos transmitirla".
Aunque como matiza, "es normal sentir que no podemos invadir el ámbito privado de las personas porque es algo muy íntimo" pero sí que podemos ayudar a los demás con una simple pregunta: "¿Cómo te puedo ayudar a ser feliz?. Sería algo muy positivo, tanto para él como para ti".
¿SALIMOS MEJORES DE LA PANDEMIA?
Josu Ahedo también ha querido aprovechar estas líneas para desmontar un mito sabido por todos. "Tras la pandemia todos pensamos que íbamos a salir mejores y que podríamos cambiar las cosas pero la realidad es que no hemos cambiado nada. Hemos perdido una oportunidad".
Analizando cuatro factores importantes, el también docente explica que a nivel económico seguimos engullidos en el capitalismo, "la gente piensa que la felicidad es el dinero, cuanto más tengas más feliz eres pero eso no es así".
A nivel político "vemos que la gestión pudo ser mejorable y la desafección del ciudadano sigue siendo enorme. Deberíamos contar con líderes con espíritu positivo y empático".
Ha querido detenerse en este punto para lamentar que "muchas veces parece que los políticos solo piensan en ellos, en mantenerse en su sillón y no en ayudar a los ciudadanos... pero como nos enseñó el tenista Rafa Nadal con su actitud a pesar de las adversidades, los líderes políticos deberían transmitirnos esa energía y ese positivismo para intentar hacernos la vida un poco más sencilla".
En lo relacionado con educación, prosigue, "tampoco han cambiado mucho las cosas. Creo que quizás sí hemos podido cambiar algo a nivel personal, en el mundo de las emociones, porque la pandemia nos ayudó a pensar que deberíamos pasar más tiempo con la familia o trabajar un poco menos para dedicarnos al ocio... nos hizo parar y ver qué es realmente lo importante".
ATRAER Y GENERAR POSITIVISMO
Por todo ello invita a la ciudadanía a que no olvide qué es lo "realmente importante. Sé que a veces no es fácil pero debemos aprender a ver el vaso medio lleno, con optimismo porque, además, eso atrae y genera positivismo alrededor".
También considera necesario "no quejarse tanto. A mí la pandemia me ayudó mucho a eso. Fue muy duro, murieron miles de personas, gente cercana... pero fui consciente de que no podía quejarme porque cada uno tiene sus propios problemas y algunos muy complicados. Si no se pueden solucionar el clima que generas a ti mismo y a tu alrededor es muy negativo".
Asimismo el escritor pide "no olvidar" la importancia de valorar las pequeñas cosas; ese café en el bar que durante tanto tiempo no pudimos tomar, llamar por teléfono a tus abuelos, mandar ese mensaje para tu amigo que va a hacer una entrevista de trabajo... "puede que todo no nos vaya bien pero, al menos, deberíamos ser más conscientes de lo que tenemos".
LA FELICIDAD NO ES SOLO EMOCIONAL
Claro que hay circunstancias muy negativas "que te ponen triste y te influyen, es normal, pero deberíamos aprender a gestionar esas situaciones y saber que forman parte de mí pero que no me pueden robar la felicidad. Estamos muy equivocados si pensamos que la felicidad está solo en el mundo emocional, solo si tengo emociones positivas puedo ser feliz, eso es un gran error", ha destacado.
"La felicidad es más que eso, es conseguir estar bien con uno mismo, estar en paz y contar con una actitud positiva. Mirar a la gente con cariño, ayudarles, sonreír, intentar ser positivo en tu trabajo, con tu familia, con tus amigos... todo esto es un modo de vida que realmente compensa".
Con todas estas claves, y a modo de conclusión, Ahedo Ruiz quiere volver a rehacerte a ti, como lector, la primera pregunta: "¿Qué vas a hacer tú para buscar esa felicidad?. Espero que los lectores puedan reflexionar sobre sus asuntos personales y puedan responder esta cuestión".