LOGROÑO, 6 Sep. (EUROPA PRESS) -
El 7 de septiembre de 2007, coincidiendo con el 30º aniversario de Würth España, se inauguró el Museo Würth La Rioja en el Polígono Industrial El Sequero, en Agoncillo. Ahora, diez años después se tiene contabilizados 359.155 visitantes desde su apertura, con 33 exposiciones.
Su atípica localización en un lugar industrial forma parte de la identidad de los espacios para el arte y la cultura que ha impulsado el Grupo Würth en algunas de sus centrales en Europa; la compañía, a través de las distintas sedes nacionales, ha puesto en marcha 14 museos y galerías en Alemania, Austria, Dinamarca, Francia, Holanda, Italia, Noruega, Suiza y España.
En estos espacios expositivos las obras de arte de la Colección Würth, que cuenta en sus fondos con más de 17.000 obras, conviven con auditorios y bibliotecas y, sobre todo, con el día a día laboral de los empleados de la empresa.
A lo largo de su trayectoria profesional el profesor Reinhold Würth, ha buscado mecanismos de mejora en las condiciones laborales de sus empleados y de la actitud de éstos ante el trabajo, y una de las fórmulas ha sido el impulso a las iniciativas culturales.
La red de museos no ha generado espacios exclusivos para los miembros de la empresa, sino centros abiertos a toda la sociedad con una clara filosofía dirigida a la educación sobre el arte contemporáneo y a la difusión de la cultura como herramienta indispensable para el progreso social.
El Museo Würth La Rioja lleva a cabo una intensa labor expositiva desde su inauguración, incorporando a través de la Colección Würth España obras principalmente de artistas del panorama nacional y local. En sus salas ha recibido también obras de artistas de la Colección Würth fundamentales para la Historia del Arte contemporáneo como Picasso, Christo & Jeanne-Claude, Warhol, Magritte, Botero, Plensa, Barceló o Basquiat.
En sus años de andadura ha puesto en marcha una vibrante programación cultural que vincula las artes plásticas con distintas disciplinas artísticas, desde la música hasta el diseño, y ha logrado abrir el museo a visitantes de todas las edades y condiciones. En paralelo, el museo desarrolla una incansable labor educativa dirigida tanto a público escolar como a familias y a personas con discapacidad. Con la inauguración de la exposición "Todo es movimiento. Op Art y Arte Cinético en la Colección Würth" el museo inició un año de celebraciones en torno a su décimo aniversario.