CALAHORRA 17 Jul. (EUROPA PRESS) -
Las organizaciones agrarias ARAG-ASAJA y UAGR-COAG alertan sobre los "cada vez más frecuentes robos en explotaciones agrícolas de la zona de Calahorra y de la ribera del Ebro".
Según ARAG-ASAJA, los robos en explotaciones frutales, que se suelen producir con mayor frecuencia en estas fechas, han experimentado un fuerte incremento en las últimas semanas "debido a la impunidad de los ladrones ante la falta de vigilancia y efectivos de las fuerzas de Seguridad del Estado".
Recientemente -explican desde el sindicato- se han robado "800 kilos de melocotones en Calahorra" y también grandes "cantidades de nectarinas y de alcachofas".
El agricultor y representante de ARAG-ASAJA en Calahorra, Jesús Pérez, ha informado a Europa Press "que la semana que viene las Organizaciones Profesionales Agrarias se entrevistarán con la Delegación del Gobierno".
También ha hablado de los términos en los que discurrió la entrevista que ocho representantes de los agricultores –incluidos algunos de los que han sufrido robos– mantuvieron el lunes con la concejal de Agricultura, Elena Arellano, y el concejal de Medio Ambiente, David Navarro.
"Los agricultores somos ciudadanos que pagamos impuestos y en consecuencia merecemos los mismos servicios y protección que el resto. Por eso pedimos al Ayuntamiento que vigile los campos que al fin y al cabo son parte del término y municipio de Calahorra", explica Pérez.
Sin embargo los argumentos del Ayuntamiento fueron que, en materia rural, la competencia es de la Guardia Civil y que ésta carece de agentes suficientes. "Así las cosas, pedimos al Ayuntamiento que se involucre hasta el límite de lo posible y que inste al la Delegación del Gobierno a vigilar".
"En el campo siempre ha habido robos –dice Jesús Pérez– pero lo de ahora es constante y revela que no se trata de sustracciones de particulares sino de grupos organizados que parece que nos tienen vigilados para actuar de forma rápida con muchas personas y con furgonetas. De otra manera no se explica que puedan llevarse una tonelada de melocotones o de nectarinas en tan poco tiempo".
El representante de ARAG-ASAJA comentaba que el campo está sufriendo muchos avatares y que el robo de cosechas completas no es posible soportarlo porque "deja al agricultor no sólo sin ingresos sino también sin posibilidad de amortizar los gastos efectuados en maquinaria, fitosanitarios, mano de obra, combustible...".
"Y todo de un plumazo". "Todos sabemos cómo está la vida –añade– y que hay gente que es posible que robe en el campo para poder alimentar a una familia, pero no es este el caso que se está dando; estos robos tienen afán lucrativo, es producto para venderlo, y habrá que investigar a dónde van a parar esos productos robados que ahora es fruta y en una próxima campaña serán pimientos igual que antes fueron las alcachofas. Y cuando no es eso, es el gasoil o la maquinaria que haya en el campo", dice Jesús Pérez.
Por último Jesús Pérez apunta a que en algunos municipios los agricultores están contratando vigilancia e incluso realizando rondas nocturnas; "pero cuando los pillas es tu palabra contra la suya y encima te arriesgas a que te peguen una paliza o te arrollen con el coche como ya ha ocurrido".