LOGROÑO, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los riojanos disfrutan de la gastronomía, eso no es ningún secreto. Pero también les gusta cocinar en casa, una tendencia potenciada en los últimos años por distintos factores como el auge de los programas de TV, la importancia de la dieta mediterránea y una dieta saludable así como la fama internacional de nuestra cocina.
¿Cómo lo hacemos?, ¿cuánto tiempo dedicamos?, ¿somos más de planificar los menús o de improvisarlos?. Estas son algunas de las cuestiones que aborda el estudio 'Los españoles frente a la cocina: gustos y costumbres', elaborado por la consultora independiente Toluna para la marca Crock-Pot, marca líder en slow cooking.
¿Ella o él?. Los riojanos son tradicionales en cuanto los roles en la cocina se refiere, y es que son las mujeres (más de 57%) las que habitualmente cocinan en casa y preparan el menú semanal. Sin embargo el 28,5% de los encuestados asegura que el hombre y la mujer comparten la actividad en la cocina. Y está claro que disfrutamos cocinando; porque confesamos que, aunque resulta necesario, también lo hacemos por placer (más del 42% de los encuestados).
Los cocineros tienen la fama, según más de un 57% de los encuestados es el hombre riojano el que mejor cocina. Argumentan que cocinar no es una obligación, sino un hobby (42,8%), y la creatividad ya que les gusta experimentar nuevos ingredientes (28,5%).
EL TIEMPO ES ORO
En cuanto a las horas que pasamos frente a los fogones, hemos aprendido a optimizar el tiempo: el 42,8% de los encuestados confiesa dedicarle entre 3 y 6 horas a la semana. Y si hablamos de días, el 71,3% de los riojanos cocina de lunes a domingo.
El tiempo juega en nuestra contra. De hecho, cocinaríamos más a menudo si tuviéramos más tiempo, según más del 57% de los encuestados. Los baleares argumentan otros motivos, además, como que la cocina les aburre, no les gusta (14,2%).
Respecto a las recetas que solemos cocinar, la sabiduría de las madres (71,4%) e Internet (28,5%) son las principales fuentes utilizadas por los riojanos para descubrir nuevas posibilidades.
Al preguntarles cómo aprendieron a cocinar, el 71,4% confiesa le convencieron las enseñanzas de la madre, mientras que el 28,5% considera ser autodidacta frente a los fogones.
¿TRADICIONALES O CREATIVOS?
Los riojanos siguen siendo clásicos, también en la cocina. Nos decantamos por los guisos tradicionales (100%). De hecho, más del 85,7% de los riojanos a los que se les ha preguntado reconoce que los platos que cocinamos ahora han perdido el sabor, el aroma y la textura de antaño y al 100% de los encuestados les gustaría recuperarlos.
A la hora de valorar la comida elegimos las propiedades nutricionales (57%), en primer lugar. El sabor, el aroma y la textura son fundamentales para más del 28,5% de los riojanos.
¿CÓMO COCINAMOS?
En la cocina de los riojanos la improvisación marca la pauta: un 85,7% frente al 14,3% que prefiere planificar el menú semanalmente.
Respecto a la forma de cocinar, empleamos, como técnicas, la cocción -primera opción, según un 42,8% de encuestados-; seguido de la plancha (28,5%) -segunda opción-, horno y freír -tercera opción- comparten porcentaje (14,3%)En cuanto a los electrodomésticos más utilizados -el 42,8% de los baleares elige la olla exprés; seguido de la olla de cocción lenta (28,5%), el horno y el microondas, estos últimos comparten el tercer puesto con un porcentaje de 14,3%.
Al preguntarles si tienen en cuenta el ahorro energético a la hora de cocinar, el 71,4% de los riojanos reconoce que no es una cuestión que le condicione, aunque intenta no abusar del gasto de energía.
¿QUÉ COMEMOS?
El 85,7% de los encuestados piensa que come saludablemente frente a un 14,3% que argumenta razones de gusto -abusa de lo que no debería- para no hacerlo. Tampoco somos de comida rápida (71,43%) ni de platos precocinados (85,7%): reconocemos no comerlos habitualmente.
El estudio, desarrollado por la consultora independiente Toluna, se ha realizado a 1.000 españoles a través de un panel online. La muestra incluía a hombres (50,7%) y mujeres (40,3%) de los siguientes rangos de edad: 25-39 (41,4%), 40-54 (44,8%) y 55-60 (13,8%).
SLOW COOKING O COCINA A BAJA TEMPERATURA
Se trata de una tendencia muy implantada en mercados como el americano, el británico o el norte de Europa, que ha llegado a España para quedarse, pues entronca directamente con nuestro estilo de vida actual y nuestro gusto por la cocina tradicional. Es perfecta para aquellas personas que no tienen demasiado tiempo o no poseen grandes conocimientos o habilidades en la cocina, pero que no quieren renunciar a preparar recetas deliciosas y saludables.
La cocción lenta, a diferencia de otras formas de cocción, permite mantener todos los nutrientes y potenciar el sabor, la textura y el olor de los alimentos, ahorrando tiempo y dinero.