LOGROÑO 11 Nov. (EUROPA PRESS) -
La consejera de Salud y Políticas Sociales, María Martín, ha visitado este lunes, junto al gerente del SERIS, Luis Ángel González, la Unidad del Dolor del Servicio de Anestesiología, Reanimación y Terapéutica del Dolor del Hospital Universitario San Pedro con motivo de la incorporación a su cartera de servicios de un innovador dispositivo para el tratamiento del dolor crónico.
El pasado 20 de septiembre realizaron el primer procedimiento de implantación del dispositivo más innovador de estimulación medular existente, intervención a la que acudieron como observadores anestesiólogos de las unidades de dolor de Intermutual de Euskadi y del Hospital Universitario de Cruces (Bilbao).
Se trata del segundo dispositivo de estas características implantado en el norte de España, procedimiento que se llevó a cabo el mismo día de la celebración en La Rioja de las II Jornadas de la Sociedad Norte del Dolor.
Por su parte, la consejera de Salud y Políticas Sociales, María Martín, ha destacado que esta Unidad "es una de las que más futuro tiene, entre otras cosas por el envejecimiento de la población y la cronicidad de las enfermedades, ambas resultado de una buena Sanidad", ha dicho. En este sentido, Martín ha subrayado que "esta Unidad sigue dando grandes pasos en el manejo de las nuevas tecnologías dirigidas a mejorar la vida del paciente". Razón por la que ha agradecido el esfuerzo y la profesionalidad del equipo de la Unidad del Dolor.
La estimulación medular ha sido recomendada por los médicos desde la década de los 70 para ayudar a las personas a controlar el dolor crónico y mejorar su calidad de vida. Los dispositivos que se utilizan para la EME se componen de unos cables delgados (electrodos) colocados sobre la médula espinal que, junto a una pequeña batería (generador) situada debajo de la piel, ayudan a modular las señales de dolor antes de que puedan llegar al cerebro.
INDICACIONES
El coordinador de la Unidad del Dolor, el doctor José Antonio Sáenz López ha explicado los detalles del nuevo dispositivo junto con la médica Ana María Ibáñez Rodríguez. Esta técnica está indicada fundamentalmente para el dolor de tipo neuropático que se produce como resultado del daño o la disfunción del sistema nervioso periférico o central principalmente el síndrome regional complejo y el síndrome de espalda fallida, caracterizada por dolor crónico después de cirugías de espalda, se utiliza también en dolor vascular/isquémico.
Actualmente se han diversificado tanto los productos utilizados para la neuromodulación como las localizaciones dónde se pueden aplicarla (subcutánea, nervios periféricos y cerebral) y sus indicaciones: dolor central, disfunciones sexuales y urológicas, incontinencia fecal, dolor visceral, cefaleas.
VENTAJAS DEL NUEVO DISPOSITIVO
El nuevo sistema de estimulación ofrece una serie de ventajas para la comodidad del clínico y de los pacientes seleccionados a quienes se les administra, desde la compatibilidad total con resonancia magnética, tecnología intuitiva e incluso tiene la posibilidad de programación en remoto para realizar la modificación de la terapia de forma telemática, desde el propio domicilio del paciente con conexión a internet, sin necesidad de que tenga que acudir a la consulta.
Esto no solo evita desplazamientos de los profesionales, sino que mejorará las condiciones del propio paciente al disminuir los inconvenientes que suponen tener que acudir muchas más veces al centro hospitalario, más aún en pacientes que viven en zonas geográficas de difícil acceso. Además, otra ventaja para pacientes y profesionales sanitarios es su perfil bajo de mantenimiento: solo necesita recargarse hasta cinco veces al año, a diferencia de otros dispositivos que se recargan semanalmente o a diario.
La neuromodulación es una ciencia que estudia la modulación eléctrica o química del sistema nervioso central para el manejo del dolor crónico o para mejorar la función neurológica, ha ido ganando terreno en el campo del tratamiento para el dolor crónico en los casos refractarios, dónde la terapia convencional no ha resultado eficaz.
La prevalencia del dolor crónico se ha disparado en los últimos años hasta afectar en estos momentos al 27% de la población adulta. Representa el primer motivo de consulta médica. Los tratamientos son de muy diversa naturaleza y el porcentaje de los que quedan sin tratamiento es alto.
UNIDAD DEL DOLOR DEL HUSP
La Unidad del Dolor depende del Servicio de Anestesiología, Reanimación y Terapéutica del Dolor del Hospital Universitario San Pedro. Desde ella se elaboran planes de tratamiento integral con el que poder recuperar en la medida de lo posible el bienestar físico y emocional del paciente. Se trata de recuperar al máximo la calidad de vida, utilizando todos los medios a su alcance para ayudar al paciente en su lucha contra el dolor, tanto con tratamientos farmacológicos como no farmacológicos.
En la Unidad del Dolor acuden pacientes con: -Lumbalgia, cervicalgia, dorsalgia, lumbociátalgia y cervicobraquialgias. -Dolor de la espalda operada o espalda fallida. -Dolores artrósicos de caderas, rodillas, hombros y otras articulaciones. -Dolor miofascial o dolor muscular (contracturas persistentes que no se han aliviado con los tratamientos convencionales) -Dolor neuropático: neuropatía diabética, radiculopatía, neuropatías periféricas, neuralgia posterapéutica, neuralgia del trigémino, dolor regional complejo, fibromialgia. -Dolor oncológico de difícil control. -Pacientes remitidos desde Urología por patología dolorosa vesical y problemas de incontinencia urinaria para tratamiento neuromodulador.
La Unidad dispone de dos consultas externas; sala de bloqueos ecoguiados, sala de Recuperación postbloqueos y vigilancia monitorizada para tratamientos farmacológicos endovenosos; sala administrativa y central de teléfono. Dispone, asimismo, de un quirófano con escopia en la zona de Cirugía Mayor Ambulatoria (CMA) para procedimientos complejos que requieren ser realizados bajo visión directa de rayos X y para implantes de estimuladores medulares y bombas de perfusión intratecal.
En esta Unidad se registraron el pasado año 3.265 consultas totales, de las que 895 fueron primeras consultas y realizaron 2.154 técnicas; de ellas, 1.454 se llevaron a cabo en quirófano.