LOGROÑO, 7 Sep. (EUROPA PRESS) -
La soprano, Ainhoa Arteta, acompañada al piano por Rubén Fernández Aguirre rinde homenaje a Federico García Lorca en el año en el que se cumple el 80 aniversario del fallecimiento del poeta de Fuente Vaqueros con un concierto en el teatro Bretón de Logroño el próximo 9 de septiembre, a partir de las 20,30 horas.
Ainhoa Arteta alterna sus éxitos internacionales en grandes títulos de ópera con recitales líricos de autores españoles, como el que presentará en el Teatro Bretón de Logroño 'La voz y el poeta', un homenaje a Federico García Lorca. Un recital en el que brilla la delicada voz de Ainhoa Arteta, con la impecable colaboración del pianista Rubén Fernádez Aguirre.
La música de los compositores catalanes García Morante, Montsalvatge y Miquel Ortega se suman a la del turolense García Abril, a la del madrileño García Leoz y a las del propio Lorca que aparte de poeta, escritor de prosa y teatro, pintor y humanista también era compositor.
La escenografía del espectáculo corre a cargo del pintor Jorge Cardarelli, que explica con sus notas al programa lo que el espectador podrá ver durante el recital. En la primera escenografía minimalista y contemporánea de este homenaje a Federico García Lorca aparece 'Forma blanca abstracta sobre oro' 2.015, del pintor Jorge Cardarelli, que representa el cuerpo del poeta fallecido. Sobre un azul intenso, que simboliza la noche en la que fue raptado y asesinado.
Confrontamos al cuerpo del poeta mediante un modesto altar con llamas encendidas, pretendiendo crear cierta magia y misticismo, como de presencia del espíritu de Lorca en el auditorio durante el recital.
El segundo acto minimalista en su escenografía, presenta una nueva obra abstracta y contemporánea, también del pintor Jorge Cardarelli 'Coral rojo', que nos sitúa frente al poeta maduro, al Poeta en Nueva York, cuando escribe 'Los corales empapan la desesperación de mi tinta'. Nos adentramos en una madurez apasionada y luminosa que se quebrará con sangre derramada, nueva evocación poética a los corales.
Acompaña a esta escenografía una ofrenda floral con rosas; en definitiva se ha pretendido rendir homenaje con flores, llamas y voz a la poesía, que sigue viva en pleno siglo 21, en el escenario de éxodos, guerras y violencia queexperimenta la Tierra. Pero donde afortunadamente también conviven la belleza y el amor.