MADRID, 24 Feb. (EUROPA PRESS) -
Políticos madrileños se han dado cita este viernes en la Real Casa de Correos, sede de la Presidencia regional, para conmemorar en un acto institucional el 40º aniversario de la aprobación del Estatuto de Autonomía de la Comunidad, con el debate abierto sobre su posible reforma, donde han puesto en valor los derechos sociales y la importancia de que se recojan en la norma.
Durante su discurso, la presidenta, Isabel Díaz Ayuso, ha defendido que Madrid es una región que "no eleva muros" sino que "los derriba" así como que es "una España dentro de otra". Ha hecho hincapié en que la Comunidad es consciente de que forma parte "de un todo", por lo que siempre han ejercido su autonomía "con lealtad" y no ha dedicado "un solo euro al negocio de la identidad".
"En Madrid hemos preferimos crear prosperidad en vez de crear una nación. Y hoy seguimos huyendo del localismo. No queremos replegarnos sobre nosotros mismos. Aquí importa dónde vamos, no de dónde venimos", ha trasladado a continuación.
Por su parte, en declaraciones a los medios, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha ensalzado que Madrid "es el reflejo de lo que es el éxito de la España constitucional" y de un país que "decidió acordar mirar al futuro". "Decidió crecer en todos los ámbitos (...) En esta Comunidad no tenemos más identidad que la suma de la identidades de todas y cada una de las personas que viven en esta región, piensen lo que piensen", ha defendido el regidor madrileño.
Así, ha reivindicado que los madrileños lo único que quieren es "conseguir sus sueños" y ha subrayado que "esa es la esencia de la Comunidad de Madrid". "Pocos lugares han tenido tanto reflejo de lo que querían los constituyentes", ha recalcado.
LA OPOSICIÓN PIDE UN MADRID "ABIERTO" Y "ASEQUIBLE"
Por su parte, la portavoz de Más Madrid, Mónica García, ha defendido una "reforma integral" del Estatuto porque el actual "no se adecúa a lo que ahora mismo exige el siglo XXI". Con la reforma, ha dicho, quieren "blindar los servicios públicos, la sanidad madrileña y ampliar los derechos que tienen que ver con el medio ambiente, la igualdad y la protección de la ciudadanía".
A continuación, el portavoz del PSOE, Juan Lobato, ha indicado que hoy se celebra la "cohesión, la convivencia y el crecimiento en avances sociales". Por eso, ha instado a mirar hacia atrás estos 40 años y en las próximas elecciones decidir si se quiere un Madrid "abierto donde cualquiera pueda tener su opinión, sus gustos e ideas, o uno actual con la presidenta donde parece que sobra aquel que no piensa como ella".
"Hay que elegir entre un Madrid con un gobierno que escuche a las familias, a los pacientes y a los estudiantes o uno con soberbia, prepotencia y que les trate sin el respeto y la sensibilidad que merecen", ha lanzado.
Para la portavoz de Unidas Podemos en la Asamblea, Carolina Alonso, es necesario recordar que el Estatuto de Autonomía reconoce como competencia propia la vivienda. "Durante todos estos años la Comunidad de Madrid no ha hecho absolutamente nada para garantizar el derecho y el acceso a la vivienda".
Así, ha denunciado que los alquileres en la región "han crecido un 13% en el último año" y que la juventud madrileña "no puede emanciparse", y cuando lo hace "se tiene que ir a un piso compartido".
Por contra, el secretario general del PP de Madrid, Alfonso Serrano, ha hecho hincapié en que los 40 años del Estatuto son "40 años de éxito" de "una región y un pueblo que ha sabido adaptarse a la nueva realidad". Además, ha subrayado que estos años no se pueden desasociar de los "gobierno del PP" que en su mayoría han gobernado la región.
"Nos sentimos muy orgullosos del trabajo que han hecho en el Gobierno y de un partido que es el que más se identifica con los madrileños, con la ciudad de Madrid, con sus 179 municipios y la realidad de todos y cada uno de ellos", ha defendido.
En esta línea, el portavoz del PP en la Asamblea, Pedro Muñoz Abrines, ha celebrado que gracias al Estatuto de Autonomía, la Comunidad de Madrid sea "vida, libertad y progreso", donde han sabido "servir a España", convirtiendo a la región en un "referente de modernidad, cultura, economía, gastronómico y artístico".