La Asociación Contra el Maltrato Animal continuará con acciones jurídicas por el sacrificio de Excalibur

MADRID 21 Oct. (EUROPA PRESS) -

La Asociación Contra el Maltrato Animal continuará con las acciones jurídicas que habían iniciado en relación al sacrificio de Excalibur, el perro de la auxiliar Teresa Romero, contagiada de ébola, pese a que ya no representará la defensa jurídica de la enfermera ni la posible reclamación de indemnizaciones por daños que pudieran causarle la muerte del animal.

Según han explicado en un comunicado, "se estaba trabajando en una operativa jurídica a fin de depurar responsabilidades" en relación al sacrificio del perro y, por "petición expresa" del marido de la auxiliar, Javier Limón, se estaba "contactando con diversos bufetes de abogados con el fin de encontrar el más apto y competente para llevar una defensa que englobara tanto la de Teresa Romero como la de Excalibur".

Sin embargo, han explicado que en la tarde de ayer Limón comunicó al veterinario Carlos Rodríguez que ya no precisa del asesoramiento de la Asociación Contra el Maltrato Animal y que ha elegido personalmente el gabinete jurídico que le representará a partir de ahora.

Por ello, la Asociación ha comunicado que "ya no representa la defensa jurídica de Doña Teresa ni la posible reclamación de indemnizaciones por daños que pudieran haberle causado a ésta y a su familia con la desmedida opción de sacrificar a Excalibur".

No obstante, alegan que la medida que se adoptó "no es óbice" para que la asociación, cuyo objeto social es la defensa jurídica de los derechos de los animales, "continúe con las acciones legales que tenía proyectadas" en relación al sacrificio de Excalibur.

SU TRABAJO

Con el trabajo "jurídico y mediático" realizado por ambas partes, lograron paralizar la orden de "eutanasia" de Excálibur durante horas, según ha informado la asociación, donde aseguran que trabajaron "durante días" para que los propietarios consiguieran la devolución de las cenizas del perro de la auxiliar.

También han explicado que tras la "innecesaria" muerte de Excalibur, consiguieron que se notificara a la familia la entrega inmediata de las mismas desde la Comunidad de Madrid.