Lo hace tras incorporar dispositivos electrónicos de la mano del proyecto europeo SIMON
MADRID, 14 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Madrid, de la mano del proyecto europeo SIMON, ha puesto en marcha una experiencia piloto de incorporación de dispositivos electrónicos (etiqueta NFC y código QR) en las tarjetas de estacionamiento para personas con movilidad reducida, de forma que los controladores del SER y los agentes de movilidad puedan verificar su autenticidad, lo que llevó en 2016 a que se interpusieran 2.355 denuncias relacionadas con el uso fraudulento de las tarjetas.
Así lo ha explicado este martes la delegada de Medio Ambiente y Movilidad, Inés Sabanés, en la presentación de la jornada de trabajo del proyecto SIMON, que se celebra en el Palacio de Cibeles con la participación de representantes de ciudades como Lisboa, Parma y Reading. La edil ha detallado que desde mediados de 2016 todas las tarjetas de estacionamiento para personas con movilidad reducida expedidas por el Ayuntamiento, ya sean nuevas o renovadas, llevan incorporados estos dispositivos.
Otra iniciativa empleada por el Ayuntamiento de la mano del proyecto europeo es la aplicación Simon Mobile, disponible de manera gratuita en dispositivos Android e iOS. La app permite localizar plazas de reservas de estacionamientos libres para personas con movilidad reducida y registrar el uso de un espacio de aparcamiento mediante la tarjeta. La aplicación también ofrece información sobre itinerarios accesibles empleando transporte público.
En este momento en Madrid están registradas 32.421 tarjetas en vigor, que autorizan a sus titulares a acceder a las Áreas de Prioridad Residencial (APR) y a aparcar en las 150.000 plazas del SER y en diversas reservas de estacionamiento dentro de la ciudad, como la carga y la descarga. Actualmente existen 7.350 reservas de estacionamiento para personas con movilidad reducida con esta tarjeta, 2.083 dentro de la zona SER. Cuentan con 8.853 plazas reservadas, 2.568 en zona SER.
Los titulares de estas tarjetas pueden además circular y aparcar en situaciones de restricción de estacionamiento en aplicación del protocolo anticontaminación y con las limitaciones temporales de circulación, como ocurrió en Gran Vía las pasadas Navidades. Las mismas facilidades son exportables a los titulares de estas tarjetas expedidas en otro municipio, comunidad o incluso país dentro de la Unión Europea.
Desde junio y hasta ahora se han cargado en Madrid 6.000 tarjetas con información sobre seguridad, además de poner en circulación más de 4.000 tarjetas SIMON. Un total de 350 personas han descargado la aplicación SIMON Mobile.
Entre las propuestas municipales para estas tarjetas se encuentra la solicitud de elevar a decreto su regulación, además de establecer un régimen sancionador que dé amparo a la multa del Ayuntamiento por usos indebidos.
En el proyecto piloto SIMON, financiado por la Comisión Europea, ha participado el Ayuntamiento, el Consorcio Regional de Transportes, la Universidad Politécnica de Madrid, el Instituto de Biomecánica de Valencia y empresas españolas, alemanas, portuguesas e italianas.