MADRID, 3 Dic. (EUROPA PRESS) -
Voluntarios madrileños de Bomberos Unidos sin Fronteras (BUSF) han trabajado en la rehabilitación del orfelinato de Techu, en las afueras de la capital nepalí, han informado fuentes de Mensajeros de la Paz.
Este es la cuarta acción que emprende esta ONG en ese país donde aterrizaron por primera vez en el terremoto que asoló a Nepal hace tres años y medio y donde murieron cientos de personas. Mensajeros de la Paz comenzó entonces su apoyo económico a la organización de bomberos, con la que mantiene unas excelentes relaciones.
BUSF ha pintado el pabellón principal del orfanato de Techú, ha renovado una parte de la instalación eléctrica muy deteriorada y que suponía un peligro para la docena de niños que viven en sus instalaciones. Igualmente los bomberos han renovado el suelo y puesto los cristales para evitar el frío y la entrada de agua en las épocas de lluvia.
Otro de los trabajos ha sido la preparación de la tierra para crear un huerto que ayude a los niños en su alimentación. Durante su estancia se ha procedido también a la renovación de las colchonetas donde duermen los niños.
Esta es la cuarta actuación de BUSF en Nepal. Tras el terremoto iniciaron la colaboración con un grupo de organizaciones que luchan por mejorar las durísimas condiciones de vida de estos huérfanos nepalíes.
En Siphal, la primera de sus actuaciones tras el terremoto, rehabilitaron el edificio afectado por el temblor de tierra, compraron camas, pintaron y sanearon un pozo, renovaron la valla del perímetro que quedó destrozada y entregaron material deportivo y ropa, de la que carecían. Siphal tiene ciento cincuenta niños internos.
Este trabajo se ha visto acompañado por la colaboración de un grupo de cocineros y dentistas que han revisado y reparado la boca a algunos de los niños.
La llegada de los hombres y mujeres de BUSF se ve acompañada siempre por pedagogos y personas que realizan actividades paralelas con los niños mientras el resto de voluntarios hace otros trabajos.
El otro orfanato sobre el que han trabajado se llama Balmandir, donde hay más de 150 niños desde recién nacidos hasta los 18 años. Este centro está situado junto a un palacio en ruinas. Allí se sanearon algunas de las zonas de recreo, duchas y se construyó un huerto similar al que está poniendo en marcha estos días en Techu.
En el último de los orfanatos, de nombre First Ray of Hope, se ayudado a escolarizar a 30 niños con el apoyo de Mensajeros de la Paz y se han comprado camas y literas, así como uniformes, ropa y material escolar.
Las actividades de BUSF se han visto completadas con el apoyo de esta organización a un centro se llama Nepal Children Organization Balmandir que se ocupa de que los jóvenes que deben abandonar los orfanatos, tras cumplir los 18 años, puedan tener formación y educación hasta que encuentren un trabajo relacionado con los estudios que han realizado.
En este proyecto se colabora con ABA Nepal y Camina Nepal. BUSF paga una beca a tres jóvenes hasta que terminen sus estudios.