MADRID 13 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Comunidad de Madrid, a través de Canal de Isabel II, ha firmado un convenio de colaboración con la empresa Captoplastic para ensayar una tecnología que elimina microplásticos en medios acuosos e impulsar la construcción de una planta experimental en Arroyo del Soto que investigue en esta línea.
Esta compañía emplea un innovador sistema, pionero en España, que los identifica, cuantifica y atrapa en el agua residual a través de partículas ferromagnéticas, ha informado el Gobierno regional en un comunicado.
"Las pruebas realizadas a pequeña escala, en instalaciones de 5.000 litros por hora, han demostrado que la aplicación suprime en torno al 90% de los residuos", ha asegurado la Comunidad.
Ahora, el acuerdo permitirá construir una planta piloto que se ubicará dentro de la estación depuradora Arroyo del Soto, en Móstoles, y será capaz de actuar sobre 100.000 litros cada hora. La iniciativa ha sido reconocida con el premio internacional NTT Data Awards.
MICROPLÁSTICOS, CONTAMINANTE EMERGENTE
Los microplásticos son fragmentos de tamaño inferior a cinco milímetros, que no se disuelven en el agua y cuya capacidad de degradación es "realmente baja".
"Se les considera un contaminante emergente que puede afectar negativamente a la salud de los ecosistemas y a la cadena alimentaria", ha explicado el Gobierno regional.
La supresión de estos elementos sintéticos e imperceptibles supone uno de los "grandes retos" para las operadoras del sector. La normativa establece cada vez criterios más exigentes en la depuración, por lo que previsiblemente a corto plazo se incluirán medidas para restringir su concentración.
Con la puesta en marcha de esta prueba piloto, la Administración autonómica toma la iniciativa para analizar este problema y buscar soluciones efectivas.
Por el momento, en la fase inicial se realizarán los ensayos para comprobar la eficacia de la tecnología, tanto en la retención de microplásticos como en el análisis de su cuantificación.
La eliminación podría realizarse después del pretratamiento, en el que se retiran los residuos sólidos más voluminosos, en su mayoría toallitas y arenas. Así se evitaría también su presencia en los lodos que se emplean posteriormente como fertilizante. Si finalmente se valida, Canal de Isabel II podía incorporar la técnica en las estaciones depuradoras que gestiona en la región.
La empresa pública, "comprometida con el desarrollo de soluciones innovadoras para la eficiente gestión hídrica y la protección del medioambiente", realiza alianzas con otras instituciones para "impulsar la investigación aplicada, la transferencia de conocimiento, la innovación y el progreso tecnológico".