MADRID, 10 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Madrid ha presentado este miércoles el proyecto Cardiomad, un programa pionero a nivel mundial que a través de una red de desfibriladores (fijos y móviles) permitirá atender a los ciudadanos en los primeros cinco minutos, que son cruciales tras sufrir una parada cardiorrespiratoria.
El programa ha sido presentado por la delegada de Seguridad y Emergencias y portavoz municipal, Inmaculada Sanz; el delegado de Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, el delegado de Economía, Innovación y Empleo, Miguel Ángel Redondo, el director gerente de la EMT, Alfonso Sánchez, el director general de Policía Municipal, Pablo Enrique Rodríguez, y el director general de Emergencias y Protección Civil, Enrique López.
Durante un acto en el Centro de Operaciones de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) de Sanchinarro, los responsables del Ayuntamiento han trasladado la importancia de esta iniciativa para dotar a la ciudad de una extensa red de desfibriladores externos automáticos portátiles, tanto en autobuses de la EMT como en vehículos de la Policía Municipal.
También han destacado el desarrollo de una aplicación que geolocalice inmediatamente al voluntario disponible más cercano a un aviso de parada cardiaca, un 'reanimador voluntario', que actuará bajo la gestión y coordinación del SAMUR-Protección Civil. Se trata de unos dispositivos seguros y eficaces que permiten ser usados por personas con un mínimo de formación y entrenamiento.
En este sentido, la EMT ha colaborado en el desarrollo tecnológico del proyecto, poniendo en marcha la aplicación en la que cualquier ciudadano puede hacerse voluntario para colaborar en una parada. Disponible para Android y iOS, les avisará mediante una notificación cuando se produzca una incidencia cercana a su ubicación para que puedan participar bajo la gestión y coordinación de SAMUR-PC.
La activación de la aplicación Cardiomad se realiza desde la central de SAMUR-PC en Madrid 112. A través de la herramienta web de monitorización y gestión, también desarrollada por la EMT, este centro de control de SAMUR-PC puede crear un radio de acción y contactar con los voluntarios para asignarles tareas y geolocalizar desfibriladores fijos y portátiles.
Cuando el desfibrilador más cercano se encuentra a bordo de un autobús de la EMT, el conductor recibe un mensaje en su consola indicando en qué parada debe detenerse para entregárselo al voluntario asignado por el centro de control de SAMUR-PC.
A la vez, al recibir un aviso, el Centro Integrado de Seguridad y Emergencias (CISEM) del Ayuntamiento informa a la Policía Municipal para activar, si es posible, a uno de sus vehículos próximos con desfibrilador incorporado.
El proyecto comprende la instalación y mantenimiento de 176 desfibriladores en autobuses de la EMT, que ya están en funcionamiento, estratégicamente repartidos en 11 líneas que discurren diariamente por la ciudad (la 1, 3, 4, 27, 51, 68, 69, 70, 147, 001 y C03).
También se han instalado en 66 vehículos de la Policía Municipal repartidos por las unidades integrales de distrito (UID) de toda la ciudad, así como en los vehículos de otras unidades policiales. Los sanitarios de SAMUR-Protección Civil se encargan de la formación para utilizar estos desfibriladores.
Hasta ahora, ya disponían, desde 1998, de desfibrilador todas las unidades básicas y avanzadas de SAMUR-PC, siendo pioneros en España en incorporar estos desfibriladores a las unidades de soporte vital básico. El cuerpo municipal de Bomberos también cuenta con desfibriladores en sus vehículos de intervención.
Promovido desde el Foro de Empresas por Madrid, es una nueva muestra del impulso que la colaboración público-privada ofrece a la ciudad y que, a lo largo de este año y medio desde que comenzó la pandemia, ha supuesto un importante avance tanto desde el punto de vista de la investigación, con proyectos como el de Idipaz (el Instituto de Investigación del Hospital de la Paz) o el del Bosque Metropolitano.
TASAS DE SUPERVIVENCIA
En España, casi 25.000 personas sufren una parada cardiaca cada año fuera de un centro hospitalario, lo que equivale a una media de una parada cardiaca cada 20 minutos, ocasionando cuatro veces más muertes que los accidentes de tráfico.
En la actualidad, las tasas de supervivencia sin secuelas neurológicas en los pacientes que atiende SAMUR-PC tras una parada cardiorrespiratoria oscilan entre el 20 y el 25 %, un nivel extraordinariamente elevado respecto a otras ciudades del mundo.
Cada minuto que pasa, además, la capacidad de que responda el corazón en términos estadísticos a la desfibrilación disminuye entre un 7-10 %. Es decir, la desfibrilación de un corazón en fibrilación ventricular al minuto de producirse es del 93-90 % y a los cinco minutos del 65-50 %, de ahí la importancia de actuar cuanto antes y de que cada minuto sea vital en caso de sufrir una parada.