Llama a poner el acento en la capacidad de diálogo, como el que consiguió "haber hecho el más difícil, el de la Transición"
MADRID, 2 Oct. (EUROPA PRESS) -
La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, ha defendido este lunes, tras el 1-O, que "un gobernante que no sepa dialogar no puede seguir en el gobierno", a lo que ha añadido que la ley no es la solución idónea para afrontar los problemas políticos y que hay que poner el acento en la capacidad de diálogo, como el que consiguió "haber hecho el más difícil, el de la Transición, donde las posiciones eran más distantes" que ahora.
"Los problemas políticos se resuelven con política, no creyendo que abriendo un sumario, abriendo instrucciones, se soluciona un problema social", ha argumentado desde el Circo Price, donde se ha presentado el abono joven cultural.
Carmena ha puesto en el centro la necesidad de diálogo. "No puede pasar un día más con representantes políticos sin capacidad de hacerlo", ha declarado. La primera edil ha defendido que ya no puede haber gobernantes "de ordeno y mando" dado que los parámetros de gestión política han cambiado. "Un gobernante que no sepa dialogar no puede seguir en el gobierno", ha apostillado.
"TERRIBLE VER TANTÍSIMA VIOLENCIA"
La alcaldesa ha aclarado que no se refería ni al presidente del Govern, Carles Puigdemont, ni al presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, para insistir, a renglón seguido, que es obligado "buscar el diálogo y no la confrontación política".
A pesar de que la alcaldesa no suele hablar sobre cuestiones que excedan las competencias municipales, en esta ocasión, dada la importancia y consecuencias del 1-O, y remarcando que es independiente de cualquier partido, Carmena ha señalado que lo ocurrido ayer le produjo una "tristeza enorme" porque fue "terrible ver tantísima violencia, fruto de no haber querido escuchar".
Carmena ha comenzado la contestación a la prensa reiterando que el referéndum fue suspendido y prohibido por el Tribunal Constitucional. "No era legal, no tenía las condiciones mínimas de un referéndum, era claramente ilegal", ha destacado la regidora, que no ha obviado que eso no significa que no se tenga que escuchar las necesidades de expresión sobre el marco territorial de una masa social.
No escuchar el sentir de los catalanes es lo que hace que "muchos se sientan lejos de España". Madrid, por el contrario, "quiere mantener sus vínculos con Barcelona y Cataluña" por ser una ciudad "amplia, diversa y de acogida con el resto de España". "Madrid quiere ser un hito de esperaza", ha terminado.