MADRID, 30 Ene. (EUROPA PRESS) -
La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, ha instado a firmar un nuevo convenio con la Comunidad para recuperar la fórmula de colaboración de forma conjunta en las obras en los centros escolares, sin tener que apelar a la buena voluntad de una u otra parte.
Así lo ha defendido este lunes en el Pleno de Cibeles, donde la alcaldesa ha dado cuenta de las acciones acometidas en el terreno educativo. La primera edil ha planteado hacer una reflexión y dar un giro en conservación, mantenimiento y vigilancia de los centros públicos de educación. El Ayuntamiento cuenta con 457 empleados públicos en 260 centros educativos.
"Los conserjes dependen del Ayuntamiento pero los directores de los colegios no tienen competencias sobre ellos", lo que se traduce en incidencias, con más de mil al mes, unido a las 50 bajas que el Consistorio no puede cubrir.
En cuanto a los derechos de superficie constituidos sobre parcelas integradas en el inventario del patrimonio municipal del suelo a favor de la Comunidad para uso educativo. El pasado año el Ayuntamiento tramitó un volumen de 62.956 metros cuadrados cuando en toda la legislatura pasada se cedieron 77.000 metros cuadrados.
Carmena ha comenzado su comparecencia, a petición propia, señalando que la educación es el principal motor de un modelo económico más sostenible y más social, que se traduce en una ciudadanía más exigente y participativa. A esto se suma que la capacidad de creación de empleo de la educación es 2,6 veces superior al resto de la economía.
Las competencias municipales directas en materia de educación, ha recordado, pasan por la vigilancia de la escolaridad obligatoria, la cooperación administrativa para obtener solares necesarios destinados a la construcción de nuevos centros docentes, la conservación y mantenimiento de los colegios públicos, la gestión de las escuelas municipales infantiles --creada la red municipal-- y la realización de las actividades complementarias en los centros docentes.
Manuela Carmena, por otro lado, ha destacado que en 2016 se incrementó la dotación presupuestaria para prevenir el fracaso escolar en un 79 por ciento dada la evolución positiva (75 por ciento del aprovechamiento y casi un 50 por ciento de aprobados) y la buena acogida por parte de las familias (90 por ciento de la cobertura).