Estudiarán denunciar a la Comunidad por "prevaricación"
MADRID, 23 Sep. (EUROPA PRESS) -
Los representantes de CC.OO. y UGT en Madrid han manifestado hoy haber sido "engañados" por el Gobierno regional con la negociación de los servicios mínimos para la huelga general del próximo miércoles, al tiempo que han asegurado que los decretados por el Consejo de Gobierno, que establecen un 50 por ciento hora punta en Metro y EMT, son "abusivos".
Representantes de ambos sindicatos han relatado que esta mañana retomaron las conversaciones con el Ejecutivo autonómico, tras el 'plante' de ayer por la tarde, y se han reunido desde las 10 horas en sede regional.
"Estábamos en un punto de gran aproximación para llegar a un acuerdo y cerrando unos flecos cuando nos hemos enterado por la prensa en la propia mesa de negociación que el Consejo de Gobierno ya estaba informando de los servicios mínimos impuestos por decreto. Esto es una falta de respeto tremenda a los negociadores, tanto de la Administración como de los sindicatos", han criticado.
El secretario de Política Institucional de CC.OO. de Madrid, Jaime Cedrún, ha explicado a Europa Press que hasta enterarse de la decisión del Consejo de Gobierno se estaba acordando con la Comunidad los servicios mínimos en Transporte.
De hecho, ha asegurado que estaba a punto de alcanzarse un entendimiento para que se siguiera lo acordado por el Ministerio de Fomento con las Cercanías, es decir, que hubiera un 25 por ciento de los mínimos, que incluso en horas punta podrían llegar hasta el 30 por ciento.
Eso sí, Cedrún ha destacado que un punto clave que han exigido ha sido que se estudiara la intermodalidad, es decir, que sólo hubiera un medio de transporte para el mismo trayecto y no dos. "El Gobierno regional no estaba de acuerdo con que no se diera el solapamiento entre Metro y autobús", ha recalcado.
Además, ha explicado que en el resto de servicios ambas partes estaban "prácticamente de acuerdo". En este sentido, ha indicado que en materia sanitaria permanecerían abiertas las urgencias y los hospitales como u n día festivo, al igual que los servicios sociales.
Respecto a la Educación, ha indicado que se había dado "una aproximación" para que pudieran abrir los colegios con el director y el jefe de estudios como personal mínimo trabajando.
Por todo ello, el sindicalista ha señalado que no, como no han firmado estos servicios mínimos, no se van a hacer responsables de su cumplimiento, al tiempo que estudiarán, junto a UGT, denunciar al Gobierno regional por prevaricación porque, a su juicio, "han actuado así a sabiendas que los servicios mínimos que han decretado son ilegales, teniendo como precedente lo sentenciado por la Justicia respecto a los de la pasada huelga general".
Cedrún considera que detrás de estos movimientos existe una "decisión política" del Gobierno regional y del PP de no respetar los mínimos para "reventar la huelga general", puesto que argumenta que sí se han alcanzado acuerdo con el Estado y otras comunidades gobernadas por el PSOE como Cataluña y Andalucía.
"TOMADURA DE PELO"
Por su parte, el secretario de Política Sindical de UGT Madrid, Carmelo Ruiz, ha calificado la reunión mantenida hoy con la Consejería de Interior como "un simulacro" y "una tomadura de pelo" a los sindicatos porque "mientras estaban reunidos en la mesa de negociación, por otro lado estaban redactando el decreto, si no estaba ya hecho".
Al igual que su compañero de CC.OO., Ruiz ha declarado a Europa Press que la negociación se encontraba estaba mañana "muy próxima" a llegar a un acuerdo y que poco antes de enterarse de la resolución del Consejo de Gobierno "se estaban limando los últimos flecos".
"Estamos diciendo que podíamos aceptar el mismo decreto que se consensuó con Fomento e incluso algo específico para Madrid. En vez de hablar de tantos por ciento en servicios mínimos, nosotros pedíamos que no hubiera solapamiento de distintos medios de transporte", ha agregado.
Según ha explicado, en Sanidad, asuntos sociales estaba todo cerrado, mientras que en Educación se estaba debatiendo si los centros iban a abrir con una, dos o tres personas. "El problema real era que no había voluntad. El transporte les ha servido de excusa. Se viene a demostrar, una vez más, que a la Comunidad le gusta más el decretazo que la negociación", ha concluido el representante de UGT.