Comunidad, ayuntamientos, Gobierno central y partidos firman el Pacto Regional por la Cañada con la abstención vecinal

MADRID, 17 May. (EUROPA PRESS) -

La Comunidad de Madrid, los ayuntamientos de Rivas, Coslada y Madrid, la Delegación del Gobierno y los cuatro grupos políticos representados en la Asamblea de Madrid han firmado hoy el Pacto Regional por la Cañada Real Galiana, un acuerdo que sienta las bases para reordenar la zona y acometer una seria de medidas "para cerrar este herida abierta" en la región, en palabras de la presidenta autonómica.

Durante el acto de firma en la Real Casa de Correos, Cristina Cifuentes ha citado a los vecinos afectados por la problemática de vivir en esta zona-- que han aplazado hoy la firma a la espera de nuevas reuniones-- , por lo que considera "conveniente" que las administraciones "se pongan a trabajar todos juntos, buscando el bien común y lo que verdad beneficia a los vecinos".

"Es un acuerdo histórico que se ha conseguido con mucho diálogo y que requiere los mayores desafíos. Todos debemos felicitarnos porque están todos los partidos con las entidades sociales en un pacto que marca el principio del final de una situación incompatible con un modelo social no queremos. Porque queremos que todas las personas tengan las mismas oportunidades. Por eso el desafío de la Cañada fue algo que afrontamos como un compromiso asumido por todos los madrileños en el acuerdo de investidura suscrito con los Ciudadanos. Por eso creamos el Comisionado, al que agradezco el excepcional trabajo que hace", ha dicho.

La dirigente regional ha recordado que el pacto fue aprobado por unanimidad en la Asamblea regional y en los tres municipios tres municipios sin un voto en contra. También se ha reafirmado en su compromiso para garantizar el derecho a la vivienda a todos los que están censados antes de diciembre de 2011 en la zona, el desmantelamiento del sector VI y la creación de tres órganos de control de todo el proceso.

"Somos un gobierno que cumple sus compromisos. Llevamos muchos años con un problemática que es una herida abierta. Ahora vamos a poner en marcha unas políticas sociales y un pacto que se visualice que cuando las organizaciones queremos y entre todos podemos llegar a acuerdos, podemos aplicar el consenso. Sabemos que sumar esfuerzos siempre, con otras organizaciones e instituciones, es el mejor camino para dignificar la situación que han vivido los habitantes de la Cañada y cerrar una profunda herida que divide nuestra ciudad y que sobre todo daña a nuestra sociedad. Gracias a todos por el esfuerzo y trabajo porque lo vamos a cumplir. Va a ser un éxito colectivo, de todos y de la sociedad madrileña", ha concluido Cifuentes.

En su turno de intervención, la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, ha afirmado que si las instituciones no consiguen hacer lo que deben es porque no cuentan con la colaboración de los demás. "Cada vez estoy más convencida de la colaboración público-privada y público-social", ha añadido la primera edila matritense, que ha citado los nombres de las asociaciones y entidades sociales que han trabajado en la antigua vía pecuaria.

"Tan importante como lo hemos hecho es que vayamos analizando cómo cumplimos lo prometido. Porque esto es una promesa y lo tenemos que cumplir", ha defendido Carmena.

Por su parte, el alcalde de Rivas Vaciamadrid, Pedro del Cura, ha manifestado que la firma de hoy supone "un punto final a algo que desde hace tiempo era un modelo de gestión de la exclusión social, que se ha convertido en gran brecha de desigualdad social del sureste madrileño". "Este pacto es una oportunidad histórica. No es el punto de llegada, es el punto de partida de la recuperación de ese espacio físico, de los derechos de las personas que allí habitan, del fin de la impunidad, delincuencia y tráfico de drogas", ha apuntado.

Del Cura se ha centrado en esa comarca madrileña, la que se expande entre Sur y el Corredor del Henares, "donde su seña de identidad era la Cañada Real, la parte más estigmatizada de la región".

También ha recordado que la zona que va desde Vallecas hasta Fuentidueña es la que menor renta per capita disfrutan sus habitantes y espera que este pacto abra la puerta para las inversiones.

En el mismo sentido, el alcalde de Coslada, Ángel Viveros, ha dicho que "se rubrica un acuerdo que sienta la primera piedra para dar solución a una zona de exclusión social" de la zona. Además, ha destacado que administraciones de diferente color político se han puesto de acuerdo y "ha primado el interés general" de los vecinos, por lo que pide no defraudarlos.

Por otro lado, la delegada del Gobierno en Madrid, Concepción Dancausa, ha reiterado que el pacto no ha sido fácil y que la Cañada es un enorme territorio con grandes contrastes, por lo que "es necesario dar solución a los conflictos y para ellos es fundamental la coordinación y colaboración entre todas las partes implicadas". "Esa voluntad de colaboración es la que anima a que este pacto sea un instrumento muy positivo", ha añadido.

Dancausa ha remarcado el trabajo de la Policía y la Guardia Civil por mejorar la seguridad de la zona. En este sentido, ha citado la presencia de agentes en la zona y la disminución de la delincuencia.

EXIGENCIAS DE LOS VECINOS

Los representantes de las diferentes asociaciones de vecinos de la Cañada Real Galiana han acudido también al acto en apoyo al Pacto Regional y en acuerdo con el inicio del proceso "que por fin dará una solución integral a todas las personas", que allí viven.

"Celebramos que todas las administraciones implicadas en el proceso estén de acuerdo, y que se haya elaborado el Pacto Regional como punto de partida (...) Celebramos que el proceso trate toda la casuística que se da en la Cañada, desde soluciones sociales a situaciones de vulnerabilidad, a soluciones urbanísticas con el mantenimiento de las viviendas existentes cuando ello sea posible", han explicado.

Sin embargo, las asociaciones han indicado que el Pacto Regional deja abierta la solución que tendrá lugar en los sectores del 2 al 5, "por lo que todavía se plantea un futuro incierto para miles de familias".

Por ese motivo han "aplazado" la firma y adhesión hoy al Pacto, a la espera de confirmar en las próximas reuniones que el proceso avanzará en la línea marcada por la Ley 2/2011 y el Acuerdo Marco de 2014, "que no es otro que legalizar el máximo número de viviendas posibles", por lo que esperan firmarlo en unos meses.

Por tal motivo, las organizaciones vecinales esperan que en las ponencias y mesas de trabajo que se van a empezar a desarrollar tras la firma del Pacto se trabaje en las afecciones que impiden a día de hoy calificar parte del territorio como suelo apto para uso residencial, y estudiar qué afecciones pueden ser eliminadas para que dicho suelo pueda ser calificado como apto para uso residencial "y garantizar que en el suelo que sea calificado como apto para uso residencial se mantendrán las viviendas existentes, siempre y cuando las mismas reúnan las adecuadas condiciones de habitabilidad e higiene, sean compatibles con una lógica y flexible normativa urbanística, y que el territorio que se pueda consolidar sea integrable en el entorno urbano existente".

Igualmente, solicitan garantizar que la posibilidad de edificar nuevos edificios para realojos en Cañada (si así se considera), además de los realojos que se distribuirán por diversos municipios de la región en busca de un equilibrio territorial, "sólo se realizará si existe espacio libre suficiente para ello, y que en ningún caso se planteará en Cañada si ello supone el tener que demoler viviendas perfectamente legalizables".

"Entendemos que lo indicado es parte del espíritu del Pacto Regional, por lo que cuando validemos en las ponencias y mesas de trabajo que se avanza en este sentido, firmaremos y nos incorporarnos de manera oficial a dicho Pacto Regional, que insistimos, tiene todo nuestro apoyo a día de hoy", han concluido las asociaciones vecinales de la antigua vía pecuaria en un comunicado.