MADRID, 27 Feb. (EUROPA PRESS) -
La concejala de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Madrid Silvia Saavedra ha tildado de "chauchau" el plan municipal de derechos humanos mientras que el edil del PP Percival Manglano ha criticado la "catolicismofobia" que dice sentir Ahora Madrid y que exculpa en nombre de la libertad de expresión.
Saavedra ha comenzado su intervención en el Pleno ironizando con la luz que "la confederación de partidos unidos" Ahora Madrid trajo a una ciudad "tenebrosa, oscura y sin derechos". Con su plan de derechos humanos "los madrileños dejan de ser unos salvajes" y lo hacen centrándose en cuestiones tan elevadas como ésta porque "no se pueden empequeñecer con la gestión de los distritos".
El "chauchau de los derechos humanos sirve para enmascarar su odio a la propiedad privada", ha lanzado la edil, que ha leído "la frase aterradora con la que empieza, que tiene que prevalecer el interés colectivo por encima del derecho individua de la propiedad y de los derechos especulativos". "¿Les suena a Fidel, a Venezuela, a Mao?", ha preguntado a la bancada de Ahora Madrid.
La concejala ha criticado que el plan "trata a los policías como malhechores y a los delincuentes como a unos pilluelos". "Los policías son malhechores que captan a una persona que lleva una bombra en su mochila angelica", ha criticado en alusión indirecta a 'Alfon'. Por último ha exigido a Ahora Madrid que "se centren en los problemas de Madrid".
El edil del PP Percival Manglano ha lanzado a Ahora Madrid que se les puede aplicar un refrán: "Dime de qué presumes y te diré de qué careces". Y es que, en su opinión, el marxismo quiere "apropiarse de la bandera de los derechos humanos por ser sus máximos violadores".
En cuanto al plan, Manglano ha destacado que recoge la libertad de derecho a la conciencia y religión asegurando que lucharán contra la islamofobia. "Sin embargo cuando la portavoz, Rita Maestre, es condenada por ofender los derechos de los católicos pero ustedes (Ahora Madrid) la defienden por su libertad de expresión", ha criticado. Manglano ha contrapuesto el "respeto que les merece el Islam" pero no tanto el Catolicismo en aras de la libertad de expresión.
La socialista Erika Rodríguez ha apoyado que los derechos humanos son una cuestión "a poner en marcha todos los días con políticas públicas" porque es "hacer política con mayúsculas". Sí echa de menos en el plan un seguimiento del cumplimiento de las metas.
El tercer teniente de alcalde, Mauricio Valiente, ha pedido seriedad a Ciudadanos porque el plan habla de todo lo que afecta a la vida cotidiana de los madrileños mientras que a Manglano le ha contestado que es un "plan de exigencia". "Presumimos de exponernos, esto es un ejercicio de democracia", ha remarcado.
Madrid es la primera ciudad española en dotarse de un plan que establece las líneas a seguir para garantizar el cumplimiento de todas las obligaciones municipales desde un enfoque de derechos humanos.
Con la aprobación del plan se constituye una mesa municipal de Derechos Humanos, con representantes de todas las áreas de Gobierno, que coordine su implantación en los servicios y programas del Ayuntamiento.
Se creará un Foro por los Derechos Humanos, abierto a toda la sociedad civil, que de forma periódica realizará el seguimiento y evaluación del plan.