MADRID, 16 Ene. (EUROPA PRESS) -
El delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín, ha criticado este martes que la presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, "desprecie" oportunidades para sentarse a hablar con él y abordar las cuestiones que le preocupan y ha vuelto a tenderle la mano.
Martín ha asistido esta mañana en la capital a los Desayunos Madrid, organizados por Europa Press, que tenían a la presidenta regional como protagonista. Ayuso ha rechazado en estos días reunirse con el delegado dado el trato que recibe por parte del Gobierno central y lo ha dejado en manos de su consejero de Presidencia, Justicia y Administración Local, Miguel Ángel García.
Preguntada por ello en esta cita, la jefa del Ejecutivo madrileño ha indicado que rechaza "fotos de galería" y de "falso consenso" cuando lo que hace falta es "concordia" y defender aquello en lo que se cree y "la verdad". "Para eso me han puesto aquí. No nos han puesto aquí para ser amiguetes y para estar buscando esa foto fácil", ha zanjado.
A la salida, en declaraciones a los periodistas, el delegado del Gobierno ha criticado que Ayuso realizase un discurso contra el Ejecutivo "lleno de hipérboles, de exageraciones, de alarmas que poco tienen que ver con la situación real en la que se encuentra la Comunidad de Madrid y, desde luego, en la voluntad que tiene el Gobierno de España para con esta comunidad".
Para Martín, "es grave" que si Ayuso se cree "una décima parte de los riesgos, de las amenazas, que ha planteado" en su intervención "desprecie las oportunidades para hablar, para sentarse y para resolver esas cuestiones".
"Desde luego, por mi parte, a pesar de los desprecios, a pesar de esa actitud que hemos vuelto a padecer, vamos a mantener siempre la mano tendida al espíritu de colaboración porque creemos firmemente en que solamente si nos sentamos, si nos entendemos, si buscamos y construimos soluciones conjuntas, podremos atender a los verdaderos problemas de los madrileños", ha trasladado, al tiempo que ha subrayado que para lo que les pagan es "para resolver los problemas de los ciudadanos y para hacer todos los esfuerzos posibles para hacerles frente".
Su disposición, según ha remarcado el representante del Gobierno de España en Madrid, es a sentarse, acordar y resolver porque para eso les pagan y "no para generar alarma social ni infundios".