Desestimado el recurso del PSOE contra la demolición del TPA de Raimundo Fernández Villaverde

MADRID, 6 Jun. (EUROPA PRESS) -

El Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 13 de Madrid ha desestimado el recurso interpuesto por la portavoz del PSOE en el Consistorio, Purificación Causapié, y la portavoz del Grupo en materia urbanística, Mercedes González, contra la demolición parcial del Taller de Precisión de Artillería (TPA) al ser posible su "descatalogación" como edificación protegida.

Tal y como recoge el fallo, al que ha tenido acceso Europa Press, pese a que el conjunto de edificaciones que integraron en su día el Cuartel de Artillería y Precisión gozó "de un cierto grado de protección en el anterior PGOU de Madrid, en 1997 dejó de estarlo, siendo posible la descatalogación cuando la autoridad competente considere que la edificación no es ya digna de aquella protección".

Además, la sentencia indica que "no se descataloga por medio de la rectificación de errores, sino que dicha rectificación viene a corregir el error descriptivo indicado de modificar la consideración de 'Catalogación remitida'". Ante este fallo judicial, cabe recurso de apelación en el plazo de 15 días.

Los socialistas, que demandaron también a Sociedad Residencial Maravillas, argumentaban en su demanda que dicho cuartel gozaba de "unas características arquitectónicas e históricas singulares". Causapié y González sostenían que era "ilegal" la licencia de demolición concedida y por tanto la demolición.

En el recursos sostenían que la licencia otorgada era ilegal porque "las edificaciones que integraban el ya demolido TPA estaban en el Catálogo de elementos protegidos del Plan General de Ordenación Urbana de Madrid de 1997 (PGOUM 97)".

González ya advirtió a comienzos del año pasado al delegado de Desarrollo Urbano Sostenible, José Manuel Calvo, de que se verían "en los tribunales" por la demolición del Taller de Artillería después de poner sobre la mesa que esta acción se llevó a cabo sin tener aprobado el convenio de gestión.

El convenio con la cooperativa Maravillas suponía la cesión de una parcela residencial para incorporar al patrimonio municipal y poder desarrollar vivienda pública, además de la cesión de un local en planta baja y espacio libre con el fin de aumentar las dotaciones públicas del barrio.