MADRID, 15 Jun. (EUROPA PRESS) -
El sector del libro, integrado por editores, distribuidores y libreros, ha expresado su malestar por el hecho de que la nueva Ley de Gratuidad de Libros de Texto se haya redactado "con total falta de transparencia" y "a sus espaldas", y avisan además de que podría tener "graves repercusiones en el empleo" dentro del sector.
La Asociación Nacional de Editores de Libros (ANELE) se queja a través de un comunicado de que la nueva ley, "a diferencia de lo que ocurre normalmente tanto en el Parlamento como en las comunidades autónomas", se ha redactado "sin contar con ellos", una situación que consideran "incomprensible", pues el sector del libro madrileño representa el "43,4 por ciento de toda la edición española y más del 50 por ciento de libros educativos".
Para la asociación, esta nueva Ley además "propone un sistema discriminatorio", ya que podría generar que "al establecer de forma voluntaria el acceso al sistema, las familias con mayores posibilidades económicas adquieran los libros nuevos para sus hijos mientras que los económicamente con menos recursos tengan que conformarse con libros usados y deteriorados".
Además de esas quejas, la ANELE considera que el texto podría contravenir "no solo mandatos constitucionales en materia de distribución de competencias entre el Estado y las CCAA", sino que "ignoraría principios básicos como los de la libertad de empresa, la autonomía de profesores y centros para optar por los libros de texto y materiales que consideren más convenientes, las normas aplicables en materia de competencia, o los derechos de propiedad intelectual que corresponden a autores o editores por el préstamo de sus obras".