Entre los futuros candidatos, figuran los actuales diputados de la Junta Raúl Ochoa y Juango Ospina
MADRID, 25 Jul. (EUROPA PRESS) -
La carrera electoral al decanato del Colegio de la Abogacía de Madrid (ICAM) empieza a calentar motores con solo una candidatura oficial para dirigir la institución colegial pero con visos de convertirse en una batalla por alcanzar la Junta de Gobierno que confrontará a dos corrientes de la Abogacía madrileña.
El actual decano José María Alonso aún no ha anunciado su disposición a revalidar su cargo y no lo hará hasta que se convoquen oficialmente los próximos comicios, según ha comentado a la prensa en varias ocasiones.
Entre los futuros aspirantes a decano figuran dos diputados de la Junta de Gobierno, Raúl Ochoa y Juango Ospina, del despacho Ospina Abogados. También suena el nombre del catedrático y abogado penalista Nicolás González-Cuéllar, excandidato en las anteriores elecciones y cara visible del movimiento Ahora Abogacía.
Esta plataforma ha arrancado fuerte a pocos meses de las elecciones y aspira a movilizar a los letrados para formular "propuestas de modernización y cambio en la Abogacía madrileña".
Por confirmar está si se presenta la Asociación Libre de Abogadas y Abogados (ALA) de Madrid, que sí ha concurrido en las anteriores convocatorias electorales.
El único candidato oficial por ahora es el abogado Raúl Ochoa, quien coincidiendo con su anuncio de candidatura fue retirado del departamento de Formación del ICAM. Desde el Colegio insistieron en que su cese no estaba relacionado con su anuncio.
"UNIR FUERZAS"
Por ahora, Juango Ospina no ha hecho oficial su voluntad de presentar una candidatura, "una decisión de futuro", asegura el abogado a Europa Press, que tomará "con consenso y voluntad" en aras a ahondar en "un proyecto que ilusione a los colegiados y mejore la Abogacía".
Según Ospina, "la Abogacía de los negocios, es decir, la que representa a los grandes despachos, responde a una realidad indiscutible de nuestro colectivo, al igual que lo hacen los jóvenes o el Turno de Oficio".
Por ello, considera que "la clave de mejorar el futuro de la profesión estará en unir fuerzas frente a nuestros verdaderos enemigos que son la falta de respeto al derecho de defensa, falta de medios o la terrible inseguridad jurídica en la que se vive entre otros muchos problemas que habría que abordar, pero sobre todo que el futuro decano, sea quien sea, tenga verdadera voluntad de cambio".
Las elecciones para elegir al nuevo decano y a la Junta de Gobierno se convocarán después del verano y ahora los futuros candidatos están buscando a quiénes integrarán sus listas electorales.
Se prevé una campaña dura que enfrentará previsiblemente a dos grandes bloques de la Abogacía: la tradicional, con el apoyo de algunos de los grandes despachos afincados en Madrid; y la que aspira a regenerar y renovar el Colegio, formada por una corriente de jóvenes abogados que aspiran a que sus reivindicaciones se vean cumplidas por una nueva dirección que aporte aires más modernos a la institución.
BUENA GESTIÓN
José María Alonso llegará a la carrera electoral, en el caso de que se presente como candidato, con una buena gestión a sus espaldas que cierra con el éxito en la celebración del 425 aniversario del ICAM, cuyo acto de apertura contó con la presencia del Rey Felipe VI y que sirvió para reivindicar la aportación de España al Derecho internacional.
El decano sin duda ha sido un abanderado en la lucha por conseguir el pago mensual de los honorarios a los 5.300 abogados que prestan el servicio del Turno de Oficio y por la actualización de los baremos, que considera en muchos casos "miserables".
Entre otros logros de su legislatura, destacan los notables avances alcanzados en materia de igualdad tanto con la aprobación y ejecución del pionero Plan de Igualdad del ICAM como con los esfuerzos realizados externamente para fomentar la igualdad efectiva en todo el sector legal, culminados simbólicamente con el cambio de denominación.
Otro de sus legados es el haber puesto las bases para impulsar el tránsito a la Abogacía del siglo XXI a través por ejemplo de la creación de nuevos espacios de trabajo compartido, como Espacio Abogacía, o el acceso colectivo a las mejores bases de datos jurídicas del mercado y a los sistemas más avanzados de gestión del conocimiento.
El sector más joven de la Abogacía es crítico con la supuesta falta de transparencia en la actual Junta de Gobierno y la ausencia de una figura de portavoz del Colegio que sirva de enlace con los medios de comunicación.
Una de las promesas de la actual Junta directiva del ICAM era implantar el voto por medios electrónicos, telemáticos o informáticos, para fomentar la participación en los próximos comicios. Pese a ello, los letrados no tendrán esta opción para ejercer su derecho de sufragio en las elecciones.
El futuro voto de los abogados jóvenes estará marcado previsiblemente por la postura que tome la Agrupación de Jóvenes Abogados (AJA), liderada por el abogado Alberto Cabello. En una de sus recientes intervenciones, Cabello ha reclamado "rescatar el estatuto del becario que lleva olvidado y cogiendo polvo en el cajón más de un año".