La Policía sostiene que este dossier contiene documentos falsos e incluye una firma de un alto cargo del Gobierno
MADRID, 16 Dic. (EUROPA PRESS) -
Uno de los empresarios presuntamente estafados por Francisco Nicolás Gómez, conocido como 'el pequeño Nicolás', ha confirmado que el joven le entregó un informe con motivo de las gestiones que iba a realizar para la venta de una finca en Toledo, un dossier que obra en la causa y que según la Policía contenía documentos falsos, han informado a Europa Press fuentes jurídicas.
El juez Arturo Zamarriego ha comenzado esta mañana con las declaraciones en la instrucción en la que se investiga al pequeño Nicolás por delitos de estafa y falsedad documental. Al Juzgado han acudido a testificar el empresario, su mujer y el director del banco en el que el primero sacó 25.000 euros para dárselos. El próximo viernes declarará el joven de 20 años.
El pasado octubre, agentes de Asuntos Internos de la Policía Nacional procedieron a la detención de Francisco al implicarle en una estafa cometida contra J.M. Según las pesquisas, el 'pequeño Nicolás' se comprometió a intermediar en la venta de una finca situada en Toledo al asegurar que era asesor del Gobierno.
En su comparecencia, según las mismas fuentes jurídicas, este empresario ha ratificado la declaración que prestó en su día en la que sostenía que conocía a Francisco de apenas unos días antes de su detención. Ante el juez, ha relatado que le conoció el pasado 5 de octubre en un restaurante del barrio de Salamanca, donde ambos coincidieron.
En una conversación, éste le comentó lo difícil que era en España vender una finca con cierto valor. En su caso, se trataba de la finca La Alamedilla, de 400.000 metros cuadrados útiles y reconstruida con piezas de grandes palacetes franceses. Perteneció a Arturo Romaní Biescas, exvicepresidente de Banesto.
Tras escuchar sus quejas, el joven se ofreció a intermediar para la venta de la propiedad, asegurándole que conocía a "grandes fortunas de España y de fuera del país". Ambos fueron a visitar la propiedad unos días después. Para esta gestión, el testigo acudió a un banco y le entregó de forma voluntaria 25.000 euros, de los que 10.000 fueron devueltos.
Las mismas fuentes han señalado que el joven le entregó un informe en un coche en uno de sus traslados, un dossier que según el testigo nunca llegó a ver, dado que la Policía se personó entonces en su domicilio y se lo quitó.
Precisamente, este informe sería la base de la acusación, ya que según la Policía incluye varios documentos que supuestamente se habrían falsificado, así como una firma de un alto cargo del Gobierno.