Afirma que no le incomoda tener que trabajar con el director cesado, que ejercerá como médico
MADRID, 18 Oct. (EUROPA PRESS) -
El enfermero que denunció a la Fiscalía y al Defensor del Pueblo la falta de personal y medios en la residencia de ancianos de Arganda del Rey tras la muerte de una anciana, Jesús Navarro, ha criticado después de conocer la destitución del director de la residencia y la reorganización de las direcciones de las residencias de Alcorcón y de Aranjuez, que el director del centro de mayores de Alcorcón no haya sido también cesado.
Navarro, quien trató de salvar el pasado 9 de mayo la vida a una nonagenaria residente que se quedó atrapada al caer de la cama, ha reprochado al Gobierno regional que al director de la residencia de Arganda lo inhabiliten como directivo y lo "manden" a su puesto de trabajo original como médico y que, sin embargo, a su equivalente en el centro de mayores de Alcorcón lo envíen a otra residencia.
"¿Por qué a uno lo premian y a otro no, es que una vida vale más que otra?", se ha preguntado el enfermero tras referirse a un incidente mortal ocurrido en el pasado en la residencia de Alcorcón en el que ha afirmado que hubo "mala práctica y mala atención". "Hubo un señor que murió también y además un familiar se quejó por una mala praxis", ha señalado.
Por otro lado, en referencia a la situación actual, en la que el exdirector de la residencia de Arganda seguirá trabajando como médico en el centro, el enfermero ha manifestado que no es algo que le incomode. "Yo seguiré trabajando por la noche y él por la mañana y además, no tengo por qué pensar más allá. Nunca he sido quien para pedir la cabeza de nadie, pues no era mi objetivo ni mi estilo", ha añadido.
NO NOTA CAMBIOS EN LA RESIDENCIA DESDE EL INCIDENTE
A su vez, Navarro ha asegurado que no ha notado cambios en la residencia -- a excepción de la contratación de una enfermera-- desde el incidente en el que falleció la anciana y se ha mostrado escéptico respecto al plan de residencias anunciado el pasado 4 de octubre en el que la Consejería de Servicios Sociales y familia anunció que contratará a 1.000 trabajadores para las residencias de mayores de la Agencia Madrileña de Atención Social (AMAS) en los próximos cuatro años.
"El plan no está ni presupuestado. Es como si hablo de que van a abrir una residencia de lujo con capacidad para 100 personas pero al final no se hace y solo consigo votos. Considero que ha sido un arma más electoral que otra cosa", ha subrayado.
Por último, ha pedido que se legisle sobre las personas mayores institucionalizadas y sobre los trabajadores que se encargan de sus cuidados para corregir deficiencias y evitar que se produzcan más incidentes en el futuro.