MADRID, 10 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Comunidad de Madrid ha inaugurado este domingo un nuevo espacio de recogimiento y homenaje a las víctimas de los atentados del 11M en la Estación de Atocha, justo debajo del lugar que ocupaba el monumento conmemorativo que se encontraba en superficie, coincidiendo con el XX aniversario de la mayor masacre terrorista de la historia de Europa.
En este mismo punto, se ha encendido al atardecer de este domingo un haz de luz azul proyectado hacia el cielo para honrar a los 192 fallecidos y más de 2.000 heridos que causaron la explosión de las bombas colocadas en cuatro trenes de Cercanías de Madrid, en las estaciones de Atocha, Santa Eugenia, El Pozo, y junto a la calle Téllez.
La iluminación especial se podrá ver también el lunes día 11, coincidiendo con la conmemoración del Día Europeo en Memoria de las Víctimas del Terrorismo y el XX aniversario de los atentados de 2004 en Madrid.
El monumento del 11-M en Atocha fue desmontado para el desarrollo de las obras de la Línea 11 de Metro, unos trabajos planteados en dos fases, una centrada en el cilindro exterior y otra para la parte interior, donde se ha instalado este nuevo memorial, en el vestíbulo de la estación, diseñado contando con la opinión de las víctimas.
Esta nueva área de recogimiento ocupa una superficie total de 2.000 metros cuadrados, cuadriplicando el espacio anterior que era de 400, aunque en el día de su apertura solo han sido visitables 1.200 metros cuadrados.
Las paredes del mismo están pintadas de color azul cobalto, el elegido por las Asociaciones de Víctimas para este entorno, y llevan grabados los nombres de los fallecidos en el atentado del 11 de marzo del 2004 de Madrid, así como algunas de las frases que se podían leer en el monumento, ahora desmontado.
Entre ellas, hay mensajes como "no a la violencia"; "todos íbamos en ese tren"; "nunca os iréis del todo"; "no hay camino para la paz, la paz es el camino"; o "por todos vosotros seremos mejores". También se recogen textos en euskera, catalán, inglés, francés, portugués, árabe, ucraniano, rumano, polaco, búlgaro y georgiano.
193 PUNTOS DE ILUMINACIÓN
Además, se han instalado 193 puntos de iluminación en el techo que representan a cada una de las personas que perdieron la vida en el atentado, las 192 que murieron en las explosiones y al GEO Francisco Javier Torrenteras, fallecido a causa de las heridas sufridas cuando siete autores de los atentados se suicidaron con bombas el 3 de abril de 2004 en Leganés.
Desde el Ejecutivo que preside Isabel Díaz Ayuso se busca así ofrecer un lugar de recogimiento y recuerdo, en un punto de la ciudad por donde pasan anualmente 15 millones de viajeros, para que el que quiera se detenga en esta zona de la estación de Atocha para honrar a las víctimas.
El Ayuntamiento de la capital anticipó la semana pasada su intención de distribuir los ladrillos de vidrio del monumento en homenaje a las víctimas del atentado del 11 de marzo en el entorno de la estación de Atocha entre las asociaciones de víctimas y los ciudadanos que así lo deseen, según indicó la delegada de Cultura, Turismo y Deporte, Marta Rivera de la Cruz.
Para poder acometer este proyecto, desde la Consejería de Vivienda, Transportes e Infraestructuras se ha mantenido en todo momentos informadas a las Asociaciones de Víctimas sobre el desarrollo de los trabajos que se iban a realizar en este espacio y se han implicado en la toma de decisiones.
Todo ello en el marco del compromiso que el Ejecutivo madrileño tiene con las víctimas del terrorismo, siendo una de las primeras comunidades en tener una Ley de Víctimas. Solo este año, el Ejecutivo autonómico destinará 15 millones de euros a abonar indemnizaciones por fallecimiento y daños físicos y psíquicos de víctimas del terrorismo en 2024, lo que supone triplicar los 5 millones de euros del ejercicio anterior.
Además de las prestaciones económicas, el Gobierno regional dedica anualmente 300.000 euros para subvencionar a entidades sin ánimo de lucro, incluidas en el registro regional o estatal, cuyo objeto es la representación y defensa de los intereses de los afectados, así como a sus familias o personas con quienes conviven.