MADRID, 28 Nov. (EUROPA PRESS) - La juez de Instrucción número 51 de Madrid, Carmen Rodríguez Medel, ha dado por concluida la fase de instrucción sobre el caso del máster cursado por la expresidenta de la Comunidad de Madrid Cristina Cifuentes y abre la fase de procedimiento abreviado, paso previo al juicio por presunto delito de falsedad documental en lo relativo al acta de su Trabajo de Fin de Máster. Así lo expone en un auto, al que ha tenido acceso Europa Press, para dar por concluida la fase de investigación como paso intermedio al juicio de este caso, donde también están investigados el catedrático y director del polémico máster de Derecho Autonómico Enrique Álvarez Conde. Además, figuran como procesados por presunto delito de falsedad documental en relación al acta del TFM la profesora de la Universidad Rey Juan Carlos Cecilia Rosado y la exasesora de la Consejería de Educación María Teresa Feito. La juez, con este paso, da traslado de la resolución a la Fiscalía y al resto de partes personadas para que se pronuncien sobre la apertura de juicio oral, ya sea para plantear su acusación o solicitar el sobreseimiento de la causa. No obstante, la magistrada del caso 'Máster' procede al archivo provisional en relación a la falsificación de las supuestas actas de convalidación de las asignaturas. Rodríguez Medel considera que los hechos relativos son susceptibles de tipificarse como falsedad documental y recuerda que las dos docentes que figuran en el polémico acta del TFM (Alicia López de los Mozos y Clara Souto), aseguraron que no estamparon su firma en dicho documento. También recalcó López de los Mozos que no presidió ni formó parte del tribunal que evaluó el trabajo de Cifuentes. También sostiene que las explicaciones de Cifuentes durante su declaración en sede judicial "no resultaron creíbles" sobre si efectivamente hizo este trabajo, condición necesaria para obtener la titulación. "Significativo es el hecho de que no conserve copia del trabajo, ni de los sucesivos borradores, ni de cualquier correo electrónico en el que remitiera el mismo o lo sometiera a corrección del profesor AC (Álvarez Conde) o cualquier correo electrónico de este corrigiéndolo", expone la resolución. También aprecia que "no parece verosímil" que en 2012 se "obviaran" esas fórmulas de comunicación "tan ágil, sencilla, rápida y accesible" y "fuera todo manual". "No resultan convincentes las alegaciones" de Cifuentes, apostilla la magistrada. Por otro lado, recalca sobre la agenda digital de la Delegación de Gobierno de Madrid del 2 de julio, fecha en la que se habría presuntamente reunido el tribunal calificador, para comprobar si aparecía esa notación, que este departamento no puede informar sobre la existencia de esa cita y que no pueden ser consultadas por el tiempo transcurrido. CREE QUE CIFUENTES PROMOVIÓ QUE LAS IRREGULARIDADES FUERAN "OCULTADAS" En este sentido, la juez aprecia una contradicción en el testimonio de la expresidenta pues esa imposibilidad también era "predicable" en marzo de 2018, cuando señaló que había comprobado que ese fue el día en el que defendió su TFM. "En conclusión, hay indicios de que Cristina Cifuentes no defendió el trabajo de fin de máster en julio de 2012 y que, cuando se hizo pública la noticia con posibles irregularidades en su titulación, promovió que fueran ocultadas, haciendo exhibición pública del acta falsificada cuando le fue recibida", apostilla Rodríguez Medel. UNA DE LAS PROFESORAS RECONOCIÓ FALSEDAD DOCUMENTAL Respecto de Cecilia Rosado, se detalla que "ha reconocido los hechos" en lo que respecta a la falsificación documental del acta del TFM y que, a juicio de la magistrada, su testimonio ha sido "plenamente convincente". "Relató muy gráficamente cómo recibió múltiples llamadas de doña T.F (en referencia a Teresa Feito) exigiéndole que hiciera el acta de defensa del trabajo de fin de máster de Cifuentes ese día 21 de marzo de 2018 (fecha en la que saltó la noticia de las presuntas irregularidades), anunciándole represalias", recoge el auto. En este punto, alude a la importancia de su testimonio por su "decidida colaboración con la Justicia para esclarecer los hechos investigados". Por ello, expone que su opinión es que se module su responsabilidad penal mediante el atenuante analógica de 'confesión tardía', previsto en el Código Penal. De la exasesora de la Consejería de Educación, se detalla que justificó su presencia en la URJC el día 21 de marzo por una visita de cortesía al rector tras haber concertado una cita con un vicerrector, algo que fue negado por este cargo de la universidad. Para la instructora, en función de las declaraciones efectuadas, "cabe indiciariamente concluir que el motivo por el que se encontraba en la URJC, en plena vorágine de la crisis vivida por la publicación de la noticia publicada por 'eldiario.es', era porque seguía las instrucciones de Cifuentes". Aparte, alude a las presuntas presiones para preparar la documentación que permitiera "superar la crisis" y al hecho de que era un cargo de confianza del Gobierno regional que presidía Cifuentes, unido a la estrecha relación con Álvarez Conde como se puso de manifiesto en diversas declaraciones de alumnos para explicar que se matricularon en estos estudios a instancias de ella. Cifuentes dimitió en abril tras estallar hace más de 30 días la polémica de la falsificación de su acta del TFM de su máster en la URJC cursado en 2012 y al haberse publicado este mismo miércoles un vídeo en la que se la habría sorprendido robando cremas en un supermercado.