MADRID, 19 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 26 de Madrid ha acordado la suspensión cautelar urgente de la demolición del antiguo Colegio Alemán, ubicado en Concha Espina, al entender que es un edificio de "marcado sentido histórico".
Así lo decreta en un auto, al que ha tenido acceso Europa Press y adelantado por 'El País', sobre las obras derivadas de la resolución del 10 de junio de 2019 del Gerente de la Agencia de Actividades del Ayuntamiento de Madrid, que concedió permiso de demolición a la Orden Hospitalaria San Juan de Dios, propietaria del inmueble, que quería extender en esta parcela las actividades del Hospital San Rafael.
Con ello estima la petición de la Asociación Española del Desarollo Ecológico Sostenible relativa a la suspensión de la demolición del antiguo Colegio Alemán.
La magistrada considera que la suspensión cautelar es acorde al objetivo perseguido, es decir, evitar daño irreparable sobre un edificio de "marcado sentido histórico" pese a que no está recogido en el catálogo de edificios protegidos del Plan General de Ordenación Urbana de Madrid.
"Ello no le resta importancia, como pieza importante de la arquitectura contemporánea de la ciudad de Madrid", aprecia el juzgado para recordar que la inclusión como edificio protegido ha sido propuesta, por ejemplo, por la Asociación Madrid Ciudadanía y Patrimonio.
"Así pues, aunque se volviera a construir el edificio, ya no se trataría del edificio original proyectado en 1957, con lo cual el perjuicio irreparable ya habría sido causado, de no quedar suspendida la demolición", argumenta el juez para agregar que reconstruir el inmueble en una hipotética sentencia favorable supondría una "inversión millonaria" para el Ayuntamiento, aparte del tiempo que "tardaría el edificio en ser reconstruido, siendo todo ello ilógico".
"Es cierto que, de suspender la demolición iniciada, al diferirse ésta, también queda diferida la implantación de la actividad autorizada por la resolución antes mencionada, todo ello en el caso de que el recurso sea estimado, pero entiende esta juzgadora que la ejecución de la demolición sería mucho más perjudicial en caso de ser estimado el recurso que la dilación de la implantación de la actividad autorizada", detalla el auto, que considera adecuada la paralización de la demolición ya iniciada.
El delegado del área de Desarrollo Urbano del Ayuntamiento de Madrid, Mariano Fuentes, avanzó el pasado miércoles que revisarán las obras del Colegio Alemán y que aquellos edificios "que merecen protección" se incluirán en el catálogo de edificios protegidos, tras llegar a un acuerdo Consistorio y los promotores de la obra.
LA DEMOLICIÓN DEL ANTIGUO COLEGIO
La demolición del antiguo Colegio Alemán, ubicado en la calle Concha Espina, comenzó la semana pasada, según hizo público Asociación Madrid Ciudadanía y Patrimonio, cuya presidenta, Amparo Berlinches, criticó al entender que se desprecia "sistemáticamente la ciudad y su arquitectura".
En los años treinta, el colegio alemán se encontraba en la esquina de la calle Zurbarán con Fortuny, sede del actual Instituto Goethe. En 1940 las instalaciones ya eran insuficientes para albergar a los 931 alumnos, por lo que en 1959 se colocó la primera piedra del centro en la calle Concha Espina. El colegio fue diseñado por los arquitectos Alois Giefer y Hermann Mckler bajo la supervisión de Willi Schoebel Ungría.
En 2015 cambió su ubicación y se trasladó a Montecarmelo con una nueva sede que se convirtió en la edificación civil más grande de Alemania en el extranjero. Actualmente los propietarios del edificio es la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios, que querría extender a esta parcela las actividades del Hospital de San Rafael.
Berlinches explicó, en declaraciones a Europa Press, que este edificio se incluía reseñado en la Guía del Colegio de Arquitectos de Madrid y que "el decano anterior dijo que cuando se fuera a tirar un edificio incluido en esta, se daría un tratamiento especial y se procuraría que no se hiciese".
Así, desgranó que querían mantener el "valor estructural" del edificio, por lo que se "podría haber reestructurado los interiores". Berlinches ha añadido que querían preservar las "decoraciones importantes" como las vidrieras de la capilla del colegio.
PROTECCIÓN EXPRESS
De hecho, según explicó la presidenta, la asociación solicitó al Ayuntamiento de Madrid que se ejecutase una "protección express" del Colegio Alemán junto con la de otros siete edificios en "grave peligro" para evitar su posible derribo.
El objetivo era iniciar un trámite por el que se revisase el catálogo de elementos protegidos del Plan General de Ordenación urbana de Madrid de 1997, ya que el Gobierno municipal "no había sido ágil".
Además de este centro educativo la organización pidió un proceso express para el Convento de las Damas Apostólicas, el Canal Isabel II, la Casa Vallet, el Parque Móvil del Estado, las Cocheras de Cuatro Caminos y el Palacio de la Música. De este último se solicitaba que no se llegase a tramitar su cambio de uso de cultural al comercial, al menos de su sala principal.
En los últimos dos años la organización ha estado colaborando con el Ayuntamiento de la capital para actualizar el catálogo de elementos protegidos del Plan General de Ordenación Urbana de Madrid de 1997, en el que no figuraba el Colegio Alemán.
"Tras esas mesas de participación desde junio de 2017, no se llegó a ninguna conclusión", ha subrayado la presidenta de la organización, lo que, según ha explicado, provocó "mucha frustración" porque no quedaban fijados documentos sobre qué edificios proteger, especialmente "la arquitectura del SXX, que tiene muy poca protección".
Es por ello, que prevén solicitar reuniones con el Ayuntamiento de Madrid y el Gobierno regional una vez se "asiente" la situación política en ambas instituciones.