Madrid defiende su capacidad diagnóstica, que puede elevar a 60.000 pruebas, para tener controlados rebrotes

MADRID, 20 Jul. (EUROPA PRESS) -

La capacidad de detección de Covid-19 en la red asistencial de la Comunidad de Madrid puede elevarse hasta aproximadamente las 60.000 pruebas diagnósticas entre PCR y ELISA, algo "fundamental" para tener controlado el Covid-19 y proceder de forma rápida al aislamiento en caso de que los rebrotes adopten mayor dimensión.

Así lo ha destacado en declaraciones a Europa Press el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, para incidir en que uno de los factores de los pocos rebrotes en Madrid es por su "gran capacidad diagnóstica" de su red asistencial y, por otro, que en la región hay "más inmunidad de lo que se pensaba".

"En Madrid ha habido más contagiados de lo que llegamos a pensar", ha deslizado para recalcar que, ahora y de cara a posibles rebrotes, es "fundamental" para evitar propagación actuar "con celeridad" entre la red asistencial y Salud Público para, una vez detectado un contagio, "rápidamente identificar" su red de contactos. "La clave es que todo lo que esté dentro de la red asistencial lo tengamos controlado", ha ahondado.

El consejero madrileño ha explicado que la confirmación diagnóstica la marca la prueba PCR, que da capacidad de detección por dos vías fundamentales: la red asistencial y los estudios de seroprevalencia.

En la Comunidad de Madrid desde el inicio de la crisis se han realizado alrededor de 800.000 pruebas PCR y se han llegado a acometer hasta 14.000 pruebas en un día, sobre una capacidad total de 20.000 test diarias, que con los seis robots que se están incorporando a la red pública se alcanzarán las 30.000 diarias.

Dos de ellos están ya instalados en el Laboratorio Central de Madrid y en el Laboratorio de Salud Pública. El resto se distribuirán entre los hospitales 12 de Octubre, Gregorio Marañón, Clínico San Carlos y Fuenlabrada, pero además Escudero ha desvelado que existe la posibilidad de instalar un séptimo en el Hospital de Getafe, lo que aumentaría aún más la capacidad diagnóstica ante el coronavirus.

Además, la estrategia de la Consejería de Sanidad es "acompasar" el volumen de PCR con la capacidad para realizar test serológicos (ELISA, QLIA, EQLIA), que es de 17.000 al día, si bien esa número de pruebas se va a ampliar a 25.000 diarias y con opción de poder llegar a las 30.000.

"Todo ello para el caso de que esos rebrotes tengan dimensión, pues la clave es contenerlos desde el aislamiento", ha añadido Escudero para agregar que esa capacidad también debe "perfilar bien" si se trata de infección activa, para lo cual es importante el método ELISA porque "precisa más".

Como ejemplo, ha explicado que actualmente en las residencias no hay infección activa y que el virus circula principalmente dentro del ámbito familiar, para lo cual esa alta capacidad de detección permite su rápida detección.

De acuerdo a los datos publicados en la web oficial de la Consejería de Sanidad en los últimos 14 días se han identificado 617 casos de COVID-19; de ellos 191 (31%) presentaban infección activa, es decir tenían capacidad de transmisión.

También ha desgranado que la Dirección General de Salud Pública mantiene un "eficaz" sistema de detección con 126 efectivos al que se están incorporando otros 18 profesionales, para un total de 144. Además, está previsto un refuerzo adicional de otros 41 y en Atención Primaria se han ejecutado 737 contrataciones en distintas categorías.

Así, se realiza una media de 1.000 seguimientos diarios a contactos estrechos de casos confirmados. La proporción de contactos que presenta síntomas durante el seguimiento y es derivada a su centro de salud es del 1,48 por ciento y de ellos un 7,05 por ciento son diagnosticados como casos.

LOS MUNICIPIOS PUEDEN HACER TEST SEROLÓGICOS, PERO SIN CONTAR CON LA RED ASISTENCIAL

Por otro lado, Escudero ha comentado que los estudios serológicos aportan información clave sobre el Covid-19, como el que se ha efectuado al personal sanitario (a 100.000 profesionales), el que se acometerá en las residencias (70.000 personas entre cuidadores y ancianos) próximamente y también el planificado para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

En este sentido, Escudero ha agregado que desvelan datos interesantes, como el caso del acometido por Torrejón de Ardoz y que mostró una presencia de la enfermedad ligeramente superior al 20 por ciento, cuando la calculada en la región por el estudio del Instituto Carlos III, con una tasa del 11,4 por ciento.

También ha puesto de manifiesto que la investigación del Hospital Gregorio Marañón, que fundamentará el estudio de seroprevalencia en las residencias, muestra una presencia del virus en el 70 por ciento de los usuarios y del 30 por ciento en los cuidadores.

Por tanto, para regular este tipo de test serológicos la Dirección General de Salud Pública elaboró una orden para que ayuntamientos y empresas que voluntariamente quieran hacerlos, puedan llevarlos a cabo con una serie de requisitos: como el disponer de un director científico y el aval de un comité ético para analizar cómo enfocan el muestreo.

Así, el consejero de Sanidad ha dicho que los municipios pueden impulsarlos cumpliendo esas directrices y que no tienen que ser masivos como el Torrejón, pero que para ellos no se puede contar con la red asistencial de la Comunidad de Madrid, que está centrada en la detección de casos y seguimiento de red de contactos.

Preguntado sobre si conviene hacer este tipo de test a jóvenes, Escudero ha afirmado que es "bueno hacerlos" porque está demostrado que son vectores de transmisión de la enfermedad y que es bueno disponer de datos sobre la incidencia del coronavirus en estos segmentos de población, dado que "desgraciadamente" ya conocen los efectos en las personas mayores. De hecho, ha apuntado que alguna universidad privada ha mostrado cierto interés en realizarlos.

De cara al curso que viene, el titular de Sanidad en la Comunidad de Madrid ha asegurado que el plan creado por la Consejería de Educación para la 'vuelta al cole' "está bien pensado" y ha defendido el cierre de la actividad educativa presencia, puesto que aparte "marcar distancia" con el virus en estas instalaciones con grandes espacios comunes supuso "parar el 40 por ciento de la movilidad" en la región, que está asociada a la docencia.