Moix mantiene que hubo una falta en el incidente de Aguirre pero cree que si hay "dudas", hay que favorecer al imputado

MADRID, 20 Ene. (EUROPA PRESS) -

   El fiscal superior de la Comunidad de Madrid, Manuel Moix, ha mantenido este martes que el incidente de la presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, con agentes de movilidad, es más una falta que delito, pero cree que habrá que estudiar la argumentación del juez para tomar una decisión sobre si recurre o no el archivo, dado que lo primero es seguir el principio jurídico 'In dubio pro reo', que favorece al imputado ante "dudas".

   Así lo ha manifestado a Europa Press con motivo de la decisión del juez Carlos Valle de acordar el archivo provisional de las actuaciones en las que se investigaba la comisión de un delito de desobediencia al no quedar "suficientemente acreditada la desobediencia y las lesiones por imprudencia" denunciadas.

   Moix, que no ha descartado recurrir el archivo de la causa, ha indicado que "esto no es un delito, como mucho una falta". "Yo no lo archivaría porque es un juicio de faltas. Pero hay que ver lo que hay en el procedimiento. Lo primero es 'In dubio pro reo'", ha aseverado en alusión a la expresión jurídica que señala que en caso de duda por insuficiente probatoria se favorecerá al imputado o al acusado.

   El archivo ha llegado poco después de que la Fiscalía de Madrid apuntara en un informe que los hechos investigados encajaban más en una falta, tal y como apreció al inicio de la causa el propio juez instructor. El informe fiscal se remitió al juez después de que se le diera traslado para informar sobre la petición de archivo formulada por la defensa.

   Tras el archivo, Moix ha recalcado que habrá que estudiar los argumentos del juez instructor para decidir si se recurre o no la decisión. En esta línea, ha subrayado que lo que sí que ve la Fiscalía es la existencia de contradicciones entre los agentes de movilidad y los de la Policía municipal, motivo que sustenta el archivo del juez.

    En la resolución, el juez entiende que la solución no puede ser otra que el sobreseimiento de la causa pues la denuncia inicial "ha sido rebatida" por Esperanza Aguirre, "existiendo incluso más apoyos a su versión que a la de los agentes de movilidad denunciantes" además de "dudas serias acerca de la credibilidad" de éstos.

   En este sentido, cita las aludidas declaraciones del instructor y secretario del atestado, "las variaciones y omisiones del agente presuntamente lesionado en sus manifestaciones ante la policía y el juzgado o el contenido del informe médico forense".

   También señala que si bien parece "incontrovertible" que los agentes de movilidad le dieron orden de alto, "no ha quedado indiciariamente acreditado que concurra un elemento esencial, conforme a jurisprudencia, para que se pueda hablar de desobediencia cual es que se percatase de la orden de la detención que se le daba".