Condenan a un doctor y a su clínica madrileña a pagar más de 60.000 euros a la joven por operarle mal el pecho
MADRID, 15 Jun. (EUROPA PRESS) -
Una joven que hace tres años fue mal operada del pecho tendrá que ser indemnizada, según ha establecido el Juzgado de Primera Instancia 45 de Madrid, que ha condenado al doctor D.M.C. y a su clínica a abonar a la paciente más de 60.000 euros, ya que como consecuencia de la intervención, la mujer, ahora de 23 años, sufrió daños estéticos, funcionales, anatómicos, psíquicos y morales.
En declaraciones a Europa Press Televisión, la propia afectada, Yasmina A.S.C., explicó que acudió a la clínica porque "estaba deprimida" debido a los "problemas de autoestima" sufridos como consecuencia de su figura, ya que se veía "el pecho caído".
Según su relato, al llegar a la clínica la atendió "un comercial o como allí los llaman, asesores estéticos", que le aconsejó, "aprovechándose" de su situación, ya que la paciente estaba en "tratamiento psiquiátrico y psicológico", que además se hiciera una liposucción de muslos, glúteos, rodillas, flancos, brazos y abdomen que le haría perder "mucho peso". "Además, me dijeron que estaba de suerte porque contratando todos esos tratamientos me saldría más barato", afirmó.
Al hilo, dijo que firmó "un montón de contratos" sin la supervisión médica y "sin comprobar" si las intervenciones se le podían hacer, ya que por entonces contaba 20 años de edad. "Lo que hicieron es vender el máximo posible de tratamientos sin que me viera ningún médico, sólo quieren venderte, te hacen promociones tres por dos como si fuera un supermercado", comentó y añadió que le aseguraron que "mejoraría mucho su estado psicológico y psiquiátrico, y físicamente".
SIN INFORMACIÓN
Asimismo, criticó que el cirujano no le informara previamente a la intervención de "cómo sería la operación ni de cómo procedería" a ella. "Simplemente me dijo que me subiría el pecho y me lo pondría mejor", recordó.
El problema surgió tras la operación y al comprobar la paciente que le habían reducido "muchísimo" el pecho, se lo habían dejado "vacío y además uno más grande que otro". Ante esto, Yasmina A.S.C. pidió explicaciones al cirujano que, según dijo, "reconociendo su error" le propuso intervenirla de nuevo para ponerle dos prótesis mamarias que igualaran el pecho, ya que uno había quedado más grande que el otro.
En este sentido, reprochó que para la ocasión tampoco le informara "del tipo de prótesis" que le implantaría, "ni de cómo procedería a la operación". De hecho, recordó que los informes quirúrgicos no iban dirigidos a ella, "sino a otras personas" cuando "supuestamente son informes personalizados y contenían datos erróneos y no señalaban la clínica en la que iba a ser intervenida". "La información fue deficiente y fatal", sentenció.
No obstante, la paciente procede a la operación y le ponen las prótesis debajo del músculo, si bien "al mes y medio" comienza a tener "dolores muy fuertes y las prótesis demasiado elevadas". Por ello, acude de nuevo al cirujano que le informa de que tiene "una cápsula de grado cuatro, que es el más grave" y tienen que volver a operarla para "romper la cápsula y poner bien las prótesis".
DAÑOS TAN GRAVES QUE NO PODRÁ AMAMANTAR
"Asustada", esta paciente decide ponerse en manos de otros especialistas que le afirman que tiene "secuelas bastantes importantes, que las prótesis se las han puesto muy altas y eso es un error médico, una mala praxis a la hora de operar".
Además, admitió que tiene "un severo defecto estético y unas cicatrices muy grandes" por lo que, como consecuencia de ello, le han quedado "secuelas permanentes". "No tengo ninguna sensibilidad en el pecho y no puedo dar de mamar porque me han amputado los vasos que van hasta el pezón para dar el pecho", lamentó.
Por último, aseguró que lo único que quiere es "que se haga Justicia para que no le pase a nadie más", así como "que se demuestre que en esta clínica venden el máximo número de productos posibles". "No pueden hacer lo que están haciendo porque están tratando con tu salud", matizó.
Desde la asociación el Defensor del Paciente, recordaron que la paciente se sometió a tres grandes cirugías en cinco meses. Además, señalaron que, previamente a las intervenciones, la mujer padecía anemia y sufría un grave trastorno psiquiátrico que le afectaba a la capacidad para discernir los graves defectos que, según dice, tenían los consentimientos informados que se le dieron, que estaban incompletos. La cliente (paciente psiquiátrica) no tenía la capacidad para ponderarlos, agrega la asociación.
Según la sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, la paciente sufrió numerosas secuelas tras la operación, lo que supone una actitud negligente del médico. El tribunal destaca que el buen resultado de la operación pudo y debió obtenerse en un primer momento.
VERSIÓN DE LA CLÍNICA
Por su parte, desde la clínica Dorsia señalaron que la sentencia ha sido recurrida ya que a su parecer la cirugía fue "correcta". Así, recalcaron que de las tres intervenciones estéticas, el juzgado ha dictaminado que la liposucción se realizó de forma adecuada, mientras que la elevación y el aumento de pecho dejó una cicatriz grande.
Además, el director general de Dorsia, Manuel Fernández, aclaró que a la paciente se le atendió en consulta y para diagnosticarle un cirujano y no un comercial, si bien añadió que antes de llegar a la operación un paciente puede pasar por manos de comerciales, administrativos y demás personal del centro.