Madrid, 8 nov (dpa) - Diez mujeres líderes de la política y la sociedad clausuraron hoy con un mensaje de paz el II Foro Mundial sobre las Violencias Urbanas y la Educación para la Convivencia y la Paz en Madrid.
"Las mujeres no rehuímos el conflicto. Cuando hay injusticia hay que revelarse", dijo la alcaldesa de la capital española, Manuela Carmena. "Pero la gran diferencia es que nosotras no usamos la violencia para resolver los conflictos. Las mujeres somos agentes de paz".
Durante dos horas y ante un auditorio que interrumpió con aplausos las intervenciones, las contertulias recorrieron desde una perspectiva feminista gran parte de los temas sobre los que versó el foro organizado por el ayuntamiento de Madrid en el recinto cultural Matadero, que englobó decenas de ponencias, talleres y actos.
Carmena aprovechó la última charla para enviar un mensaje de esperanza y pedir un cambio cultural. "¿Por qué hemos elegido este extraordinario panel para terminar? Tiene una explicación: nosotros hemos definido 2018 como el año violeta. Millones de mujeres salieron a la calle para recordar que el protagonismo de las mujeres es algo pendiente. Debemos ser protagonistas en el siglo XXI y en los siglos siguientes", dijo.
"La violencia sigue ligada a la cultura del machismo y a ese concepto erróneo de la masculinidad. Antes hemos oído que en América Latina hay 400 homicidios al día. Pero esa estadística no dice que la mayoría están cometidos por hombres. Apenas un 1 por ciento por mujeres", agregó.
"Tenemos que decirlo. Las mujeres no tenemos las manos manchadas de sangre", insistió Carmena, que no obstante señaló que la "cultura de paz" se ha ido abriendo camino en el siglo XX pese a las atrocidades de las guerras mundiales.
Según señaló, la violencia interpersonal se ha reducido en un 16 por ciento. "Y eso se debe en parte al triunfo de los valores de las mujeres", aseguró. "Solo hay que leer a las mujeres del pasado. Las corresponsales de guerra todas hablaban en contra de la guerra, pero no se les escuchaba. Ahora estamos aquí sus hijas y nietas para que se sepa que la voz de las mujeres es la voz de la paz".
Sentada junto a Carmena, la Secretaria General Iberoamericana, Rebeca Grynspan, trazó un dibujo algo más pesimista de Latinoamérica, a la que calificó como "una de las regiones más violentas del mundo".
Al dato de los 400 homicidios diarios, añadió que más de la mitad de los ciudadanos dicen vivir con miedo. Además, admitió que muchos países de la región están entre los peores en estadísticas de feminicidios.
"Hay que cambiar la concepción de las masculinidades y hay que lograr que las mujeres tengan más autonomía", dijo la funcionaria costarricense, que además señaló algunas medidas inmediatas que se pueden emprender para reducir la violencia en las ciudades.
"Sabemos que donde se ponen zonas públicas para deporte, cultura o arte, se reduce la violencia. Sabemos que donde hay menos hacinamiento se reduce la violencia. Sabemos que poner más luz en la ciudad reduce la violencia. Pero hace falta también una visión a más largo plazo", señaló.
La región latinoamericana estuvo representada también por la presidenta de la Asociación de Municipalidades de Bolivia, Rocío Alejandra Molina, y por la alcaldesa de Rosario, Mónica Fein.
Molina aseguró que su país está en un "proceso de cambio" y destacó que más del 50 por ciento de los parlamentarios bolivianos son mujeres, pero que todavía hay mucho que hacer para erradicar la "violencia estructural". Por su parte, Fein recordó la fuerza del movimiento feminista en Argentina y la lucha por aprobar una ley en favor de la interrupción voluntaria del embarazo. "Hemos ganado muchas batallas, pero aún quedan muchas por dar", advirtió.
Además, también participaron en el panel Liv Torres, directora ejecutiva del Centro Nobel de Paz; Concepción Gamarra, alcaldesa de Logroño y vicepresidenta primera de la FEMP; Beatrice Fihn, directora ejecutiva de la Campaña Internacional para Abolir las Armas Nucleares; Emilia Saiz, secretaria general de CGLU; Elena Biurrun, alcaldesa de Torrelodones, y la tunecina Ouided Bouchmaoui, premio Nobel de la Paz 2015.
En su breve discurso de clausura, Carmena agradeció al papa Francisco el mensaje de apoyo que envió al foro y que fue leído durante la charla de mujeres, además de insistir en lo que ya dijo el lunes en la inauguración citando al legendario ex presidente sudafricano Nelson Mandela: "La violencia no es consustancial al ser humano".