MADRID, 26 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los organizadores del Orgullo Mundial han definido las fiestas como las de la diversidad aunque tampoco han dejado de recordar que, según el Ministerio de Interior, el pasado año aumentaron en España un 36 por ciento los delitos de odio por identidad sexual y orientación de género.
"Eso va a estar muy presente. Vamos a celebrar y a vencer esos odios pero tenemos que tener en cuenta que queda mucho trabajo por hacer", han declarado el presidente de COGAM, Jesús Grande; el presidente de FELGTB, Jesús Generelo, y el coordinador del WorldPride, Toni Poveda, tras asistir al despliegue de la bandera arcoíris en el Palacio de Cibeles.
Las declaraciones se han producido después de conocerse que los tres neonazis que agredieron e insultaron este fin de semana a una pareja homosexual en la plaza de Pedro Zerolo han sido puestos en libertad sin medidas cautelares por un presunto delito de odio.
De la bandera "solidaria y diversa", una "verdadera maravilla", Grande ha confesado que ha sido un gesto "muy emocionante", mientras que Generelo ha puesto el acento en la simbología ya que la "avalancha de libertad e igualdad" procede de la ciudadanía, ahora "canalizada" a través de las instituciones.
Poveda ha destacado que con esta acción se normaliza algo por lo que "vale la pena haber luchado tanto durante tantos años". "Es el día de toda la ciudadanía, de toda la diversidad. Lo hemos convertido en Madrid no sólo en un día de reivindicación sino en las fiestas mas importantes de esta ciudad", ha subrayado. Grande, a su vez, ha pedido que en estos días se recuerden a todas las personas LGTBI en el mundo que no pueden manifestarse como son.