MADRID, 1 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Asamblea de Madrid, Enrique Ossorio, ha reivindicad este viernes la capacidad de Madrid de "levantarse y anteponerse a lo malo" y la "prosperidad y crecimiento" en sus 40 años de autonomía.
Lo ha hecho en el discurso que ha dado inicio al Pleno que celebra la Asamblea de Madrid este viernes para homenajear las cuatro décadas desde que se abrieran las puertas de la Cámara regional en el Caserón de San Bernardo en 1983.
Precisamente el comienzo de la andadura de la "joven democracia" regional ha centrado el discurso de Ossorio, quien ha comenzando agradeciendo el trabajo de los diputados, comparecientes y personal de la Cámara que han permitido que el poder legislativo se haya ido desarrollando a lo largo de 40 años.
El presidente de la Cámara ha narrado cómo en 1983 había un ambiente político "ilusionante" mientras se daban los primeros pasos de la "andadura de la primera legislatura", con Joaquín Leguina (PSOE) al frente. Fue en esos años en los que se establecieron los "cimientos legislativos" de la autonomía y a él remiten, entre otros, la creación del Servicio Madrileño de Salud.
"Es un año ilusionante porque se consolidaba la Transición, aunque el estado económico y social no era fácil", ha proseguido Ossorio. Ha recordado que eran los años "más duros" de ETA, había una crisis económica, la reconversión industrial no daba los frutos esperados, llegaba la heroína a las calles madrileñas mientras también proliferaban las barriadas de chabolas. También ha puesto el foco en que ese año tuvieron lugar episodios trágicos como los dos accidentes aéreos, en Barajas y en Mejorada, y el incendio de la sala Alcalá 20.
"Aún así la joven democracia daba pasos al frente y comenzaron las movilizaciones contra ETA y se declaraba el 6 de diciembre como Día de la Constitución, cinco años después de su aprobación", ha añadido Ossorio. A pesar de los momentos complicados también se vivió la explosión de la creatividad y se convirtió Madrid en "epicentro cultural y artístico", la ciencia daba el primer trasplante de páncreas y la sociedad madrileña luchaba por "dejar atrás los tristes 70".
"Es esa característica de los madrileños de levantarse y anteponerse a lo malo. Capaces de 'Volver a empezar', el título de la película de José Luis Garci que ganó el Oscar a Mejor Película Extranjera ese año, en 1983. Es un espíritu que nos ha acompañado en 40 años. Estamos orgullosos de esta larga etapa de crecimiento y prosperidad. Gracias a quienes han contribuido a conseguirlo", ha concluido.