MADRID 25 Jul. (EUROPA PRESS) -
La plataforma Millán Astray y los legionarios veteranos que la conforman han comparado la reacción que dicen que se ha producido contra el anuncio del Ayuntamiento de Madrid de cambiar el nombre de la calle dedicada al fundador de la Legión, en aplicación de la Ley de Memoria Histórica, con "reflejos patrióticos similares a los que ya manifestó el 2 de mayo de 1808".
Indican que "más de 400 vecinos de General Millán Astray y sus aledaños han manifestado su deseo de que la calle se siga llamando igual que siempre por la vía de suscribir recursos de reposición contra dicha decisión arbitraria" del Ayuntamiento.
Lo hacen en un comunicado, en el que dan cuenta de la respuesta enviada por el Defensor del Pueblo, que insta al Ayuntamiento a aportar la información requerida. La plataforma Millán Astray denunció hace más de cinco meses ante el Defensor del Pueblo "los múltiples incumplimientos del Ayuntamiento de Madrid y del Comisionado de la Memoria Histórica del Consistorio de la capital de España en el marco del procedimiento de retirada del nombre de la calle al Fundador de La Legión".
Una segunda queja ha llevado al Defensor del Pueblo a reclamar al Consistorio una respuesta urgente. En el documento, al que ha tenido acceso Europa Press, el Defensor del Pueblo echa en falta "la ausencia de participación de los interesados, en el caso de que los haya, a lo largo de la tramitación del procedimiento" ya que "ha de existir un trámite de participación de los interesados, a quienes se ha de dar traslado de la propuesta del Comisionado para que formulen las alegaciones que a su derecho convenga".
Desde la plataforma han contestado que el Comisionado de la Memoria Histórica les ha "negado sistemáticamente realizar alegaciones a su propuesta de retirada del nombre de la calle al General Millán Astray".
"Esto evidencia que lo que es ilegal no es el nombre del fundador de La Legión en el callejero de la capital de España sino un procedimiento como el establecido por el Ayuntamiento de Madrid para retirar su nombre, que impide a las partes afectadas, como son los vecinos, comerciantes y asociaciones, participar en dicho procedimiento", han remachado.
También han criticado que al Gobierno municipal "se le llena la boca de democracia participativa pero luego en la realidad niega a los madrileños un trámite esencial en el derecho administrativo como es poder expresar con plenas garantías su legítima disconformidad con los procedimientos que pretende llevar a cabo".
La Plataforma General Millán Astray ha hecho un llamamiento para que "cese esta espiral de odio y sectarismo auspiciado por el Ayuntamiento de Madrid y que en vez de crear problemas artificiales se dediquen las autoridades municipales a solucionar los problemas de los madrileños, que cada vez son más graves y acuciantes".
El escrito del Defensor del Pueblo también recoge que han conocido por los medios de comunicación que la plataforma ha recurrido el cambio de nombres aprobado y les pide que confirmen ese extremo porque, de ser así, esta institución no podría continuar con las actuaciones en marcha.