MADRID, 13 Jun. (EUROPA PRESS) -
El programa de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) de acogida al refugiado potenciará el aprendizaje del español para sus beneficiarios, adapta los créditos de estudio para favorecer su integración y buscará también la colaboración de otras universidades públicas de la región.
Este programa pionero ha permitido en su primera experiencia piloto el acceso a estudios de 16 estudiantes durante el curso 2016-17, de diferentes países (Siria, Irak, Pakistán, Palestina, Colombia, Venezuela, Guatemala, Guinea Ecuatorial, Sudan, Ucrania). Además, más de 200 personas han solicitado adherirse a su oficina específica para atender a los refugiados.
Concretamente, las personas que se han beneficiado de este programa han sido 11 estudiantes de Grado, dos estudiantes en Másteres y tres estudiantes en Doctorado. En su mayoría son jóvenes aunque también hay personas que rondan los 40 años e incluso un matrimonio que estudia un máster.
La iniciativa ha sido presentada este martes por el rector de la Universidad Complutense de Madrid, Carlos Andradas, quien precisamente ha firmado con el presidente de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), Carlos Berzosa, el primer convenio de colaboración de apoyo a las personas refugiadas.
El acuerdo impulsará iniciativas que mejorarán la situación social en Madrid de este colectivo de personas que solicitan protección internacional y que residen en territorio español.
La delegada del Rector para la Diversidad y la Inclusión de la UCM, Mercedes García, ha explicado a Europa Press que la Oficina UCM de Acogida a Personas Refugiadas realiza una serie de entrevistas para aquellos refugiados que quieran continuar sus estudios.
En ellas, no solo se evalúan sus características académicas sino que se estudie sus condiciones socioeconómicas para desplegar medidas que garanticen su acogimiento, mediante una colaboración "en red" con entidades sociales, Ayuntamiento y Comunidad de Madrid.
FLEXIBLES CON LA DOCUMENTACIÓN
García detalla que en el caso de estos alumnos se flexibiliza la documentación para proceder a la matrícula, pues hay casos en los que "carecen de ella", y se despliega apoyo económico para lograr su integración y que puedan continuar sus estudios.
El "reto del idioma" es una de las cuestiones que han quedado patentes en esta experiencia piloto y debe ser uno de los "puntos fuertes" del programa, pues las personas que no dominan ni el castellano ni el inglés tienen dificultades para completar con "éxito" sus estudios.
Por ello, la universidad ha diseñado una estrategia conjunta con el Centro Complutense de Enseñanza del Español (CCEE), que ya acogió en sus aulas a cinco estudiantes para que aprendan español. Así, se habilita un grupo de estudiantes que colaboran para que tengan un aprendizaje del idioma "normalizado", unido a un plan de seguimiento para comprobar el progreso.
Otro aspecto es la "flexibilización" a la hora de afrontar sus estudios para lo cual la Complutense les recomienda, en el caso de los refugiados que no dominan el castellano, que se matriculen de 30 créditos y realicen sus estudios de forma paulatina.
En caso de que su situación lo aconseje, también se opta por fomentar que los refugiados realicen estudios medios que les permitan luego acceder a los superiores.
García ha enfatizado el completo programa en el que participan los servicios de orientación y asesores que analizan su situación. En julio se evaluará el programa para que se realice con "más fuerza". La delegada del Rector en materia de Diversidad también recalca que es necesaria la colaboración de otras universidades para garantizar el acogimiento de estos estudiantes refugiados.
Por ello, destaca el compromiso del rector de la UCM y de toda la comunidad para favorecer la acogida e integración de refugiados. "Son personas que quieren rehacer su vida", ha agregado García para enfatizar en la necesidad de lograr patrocinios que permitan un mayor número de beneficiarios.