MADRID, 28 Abr. (EUROPA PRESS) -
La presunta trama que estafó hasta 8 millones a empresarios al inicio de la pandemia tendría como compinche a una empleada de una sucursal bancaria, quien habría avalado las operaciones en las que los estafadores ofrecían financiación para salvar los negocios arruinados por las restricciones del estado de alarma, han informado a Europa Press fuentes jurídicas.
Así se desprende de la testifical prestada esta mañana por los empresarios ante el juez Juan José Escalonilla, ante quien se han presentado como "víctimas de una estafa" ratificando las denuncias por delitos de blanqueo de capitales, falsedad documental, estafa y pertenencia a organización criminal.
El magistrado investiga a este entramado corrupto a raíz de acumular en un mismo procedimiento penal hasta nueve denuncias interpuestas en distintos puntos de España, entre ellos Madrid, Barcelona y Palma de Mallorca.
Uno de los perjudicados ha manifestado en su comparecencia que antes de firmar y pagar el aval para que le concedieran un préstamo visitó, junto con uno de los investigados, a la directora de Empresas de una sucursal bancaria de Barcelona en su despacho bancario. Esta empleada de banco le habría confirmado que la operación era correcta.
La mayoría de los estafados fueron asesorados antes de entregar las elevadas cantidades de dinero al entramado. Las víctimas han relatado que se les engañó a través de la manipulación de lo que se conoce como swifts, un documento bancario que emite un banco a favor de otro de distinto país.
EN UN MISMO PROCEDIMIENTO
La Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) inició las pesquisas a raíz de las denuncias de empresarios de distintos puntos de España, entre ellos Madrid, Baleraes y Alicante.
Las denuncias se acumularon en un mismo procedimiento a cargo del juez Juan José Escalonilla por la presunta comisión de delitos de estafa agravada, blanqueo de capitales, falsedad documental y organización en banda criminal.
El 'modus operandi' de la banda consistía en ofrecer a sus víctimas un préstamo sin garantías y a cambio de un seguro de caución y una elevada inversión. Uno de los empresarios, el dueño de una empresa de helicópteros balear, llegó a entregar hasta 3 millones de euros.
Uno de los perjudicados es un empresario peruano que contactó con la banda a través de una persona que le pone en contacto con uno de los presuntos líderes del entramado corrupto. Le convencen entonces de un falso préstamo sin garantías reales y acaba dando unos 2 millones de euros.
En la operación policial que desarticuló a la banda fueron detenidas doce personas, que quedaron en libertad provisional. Los investigados declararán ante el juez los días 17 y 19 de mayo.
En el marco de la instrucción, las acusaciones han solicitado al juez que confisque hasta 48 coches de lujo intervenidos a la presunta banda criminal. Entre los vehículos figuran Mercedes de alta gama, Maseratis, Ferraris y Rolls-Roice.